CONFIANZA | MUD asegura que testigos y captahuellas suplirán ausencia de la tinta indeleble
Con información de Crónica UNO
El próximo 15 de octubre los electores que participen en las elecciones regionales no podrán sacarse la tradicional foto con el dedo meñique manchado de tinta. El Consejo Nacional Electoral (CNE) decidió prescindir de este mecanismo de seguridad, luego de que la Universidad Central de Venezuela (UCV) se negó a elaborar el líquido para las cuestionadas elecciones a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
La tinta era un mecanismo más de control y seguridad, para evitar o reducir el voto múltiple, es decir, que una persona vote más de una vez. Cómo es conocido, el líquido permanecía en la piel del elector durante algunos días para identificar a quien ya había ejercido su derecho al sufragio.
Los técnicos de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) aseveran, sin embargo, que el uso del sistema biométrico (captahuellas) de identificación de electores y la acreditación de testigos en las más de 30.000 mesas de votación que funcionarán en los comicios, son garantía suficiente para evitar o detectar cualquier irregularidad. “La verificación es la que se hace por la huella dactilar, nosotros ya auditamos ese sistema y funciona correctamente”, señaló Vicente Bello, representante de la MUD ante el CNE.
Félix Arroyo, asesor en materia electoral, recordó que durante el proceso de votación los electores deben colocar los dedos índice y pulgar de ambas manos en las máquinas captahuellas, para verificar la identidad del votante y comprobar que este no haya sufragado con anterioridad. “Si hay testigos no es posible que voten más personas en las mesas”, expresó.
Enrique Martínez, representante de La Causa R ante el Poder Electoral, concordó con esta opinión y señaló que, en las auditorías posteriores a las elecciones, se comprobó que la incidencia del voto múltiple es reducida, siempre inferior a 1% del Registro Electoral. “No es grave, desde mi punto de vista. Sería bueno contar con la tinta, que es un elemento más de seguridad, pero no va a ser necesariamente un riesgo. Es un riesgo calculado”.
Los tres técnicos coincidieron en que la tinta se ha convertido en un elemento tradicional de la cultura electoral de Venezuela, sin embargo, señalaron que el sistema no siempre es efectivo. “La tinta es buena y es fabricaba por la UCV. Pero a medida que pasan los electores dejan residuos de desengrasante -que se aplica al dedo antes para que se adhiera la tinta- y la tinta va perdiendo efectividad y se puede remover. Es algo que no se usa en ningún otro país, no me preocupa en lo absoluto”, aseveró Arroyo.
Según reseña el portal Crónica UNO, estos expertos ratificaron que los testigos son el mejor mecanismo de control con el que cuenta la oposición en las elecciones. Bello aseveró que la coalición aspira a desplegar un contingente cercano a las 200.000 personas para que vigilen los centros de votación. Esto representa más del doble de lo requerido. “Son las mismas personas del 6D (2015). Esa estructura está intacta y la hemos movilizado en varias elecciones, solo estamos esperando que abran el sistema de acreditación de testigos, tenemos en todas las mesas. Son los mismos de ocasiones anteriores, así que cuentan con el adiestramiento”.