Concentración y el trabajo
Redacción 800 Noticias
La concentración es una habilidad esencial para el aprendizaje y el desempeño laboral, por lo que la falta de esta puede repercutir en nuestra productividad. Asimismo, también afecta a la ejecución de nuestros quehaceres cotidianos: saltamos de una actividad a otra sin terminar la primera, nos lleva más tiempo concluir tareas, no escuchamos de la misma manera, sufrimos olvidos de importancia, etcétera.
“Uno de los problemas que nos estamos encontrando es que, al percibir que nuestro rendimiento se altera, solemos intentar compensar esta falta de productividad dedicando mayor tiempo a la tarea. Sin embargo, esta estrategia no siempre es la mejor solución, ya que puede aumentar nuestro nivel de cansancio y fatiga, haciendo que entremos en un bucle de improductividad. Lo importante es la calidad del tiempo que dediquemos a la tarea, y no la cantidad. A veces, la mejor estrategia es parar, desconectar y descansar”, recomienda Aristimuño.
“En nuestra sociedad, estamos acostumbrados a convivir con múltiples estímulos simultáneamente (televisión, teléfono móvil, redes sociales, trabajo, preocupaciones, niños, etc.). No obstante, esto tiene importantes consecuencias para nosotros, ya que tenemos una capacidad atencional limitada”, dice la experta de Centro TAP.
“Todas las personas necesitamos una rutina para sentir seguridad y para poder automatizar nuestras tareas cotidianas. Al automatizar tareas, afrontándolas desde el piloto automático, podemos destinar nuestros recursos cognitivos a otras cuestiones que nos resultan más novedosas, relevantes o complejas”, comenta la experta en Psicología Infanto-juvenil.
En resumen, la atención se encarga de la selección de información, mientras que la concentración se refiere al tiempo que se mantiene dicha selección.
Fuente: A tu Salud en Línea