Con el 97,57% de los votos el NO aventaja por 3,12% al SÍ en Bolivia
AFP
El cómputo oficial del referendo por la reelección del presidente boliviano Evo Morales estaba al rojo vivo en un tramo final de infarto que podría inclinar la balanza hacia cualquier opción, aunque el No continuaba llevando una ajustada ventaja.
El registro oficial al 97,57% ponía arriba al No a la reforma constitucional con un 51,56% frente al 48,44% del Sí, en una ajustada ventaja desfavorable a Morales.
Aunque existe una enorme incertidumbre por el resultado, que ha dado lugar a sospechas de la oposición de que se estaría fraguando un fraude, la misión de observadores de la OEA llamó a «las fuerzas políticas a aceptar los resultados que entrega el Órgano Electoral Plurinacional, única autoridad competente para esta tarea».
También resaltó que el escrutinio «está llevándose a cabo con la presencia de delegados del Sí y del No, lo que garantiza la transparencia de los procedimientos».
El martes temprano, Morales había expresado su esperanza de que los votos de comunidades indígenas apartadas, que estaban siendo contabilizados a última hora, pudieran revertir la tendencia de los resultados.
Morales presagió más tarde que «si ganamos será por pocos votitos, si perdemos será por pocos votitos», pero «después de diez años (en el poder), la mayoría sigue apoyando el proceso».
La víspera, el presidente aseguró que respetará los resultados definitivos. Una victoria en este referendo permitiría a Morales postularse a un cuarto mandato, hasta 2025.
Según el analista independiente Andrés Torres, en entrevista con la AFP, por más que Morales triunfe ajustadamente, el resultado lo deja «vulnerable a los ataques de la oposición, que buscará que su gestión (que concluye en 2020) no termine en los mejores términos, para que no pueda volver» a postularse.
El politólogo Jorge Lazarte, exvocal del Tribunal Electoral, consideró que el resultado corrobora que «una parte del país (…) le dijo basta» a Morales, lo que le obligará a consensuar sus políticas en adelante.
Si se confirma la tendencia del voto, sería la primera derrota electoral directa de Morales en sus 10 años en el poder, aunque en 2015 su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), perdió plazas clave en los comicios municipales.