Sólo falta la delegación de la MUD para iniciar la nueva jornada de negociaciones
Sugey Díaz / EFE
Poco antes de las nueve de la mañana de este viernes comenzaron a llegar a la nueva jornada de negociación los participantes del diálogo.
Según reseñaron las cuentas oficiales de Twitter de las cancillerías de Venezuela y República Dominicana ya se encuentran en el lugar el presidente Dominicano y el expresidente español José luis Rodríguez zapatero. También los cancilleres de los países acompañantes: Chile, Paraguay y México.
Los últimos en llegar fueron Elias Jaua, Jorge Rodríguez y Delcy Rodríguez por parte de la delegación del presidente de Nicolás Maduro, sin ofrecer declaraciones a la prensa.
Se espera que en minutos se presenten en el lugar los delegados políticos de la oposición venezolana.
Durante la jornada del jueves, los representantes de la MUD y el gobienro analizaron los seis puntos de la agenda a puerta cerrada en la sede de la Cancillería dominicana.
Hoy continúan con la integración del presidente dominicano, Danilo Medina, quien dirigirá las negociaciones, y los cancilleres de los países acompañantes.
A su llegada a la reunión del jueves, el ministro venezolano de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, dijo que están con la «mejor de las expectativas para lograr un acuerdo de convivencia pacífica que ponga fin a la violencia en su país.
Sin embargo, advirtió de que «sectores violentos» en su país se han estado reagrupando para «volver otra vez a la violencia» y se refirió a declaraciones de organizaciones políticas de oposición en el sentido de que volverían a las calles si el diálogo no arroja los resultados esperados.
Por su parte, el diputado Julio Borges, que encabeza la delegación opositora no hizo declaraciones a su llegada al encuentro.
Los puntos centrales para la oposición en este diálogo son lograr garantías electorales con vistas a los comicios presidenciales previstos para 2018, la apertura de un canal humanitario que permita el envío de medicinas y alimentos, la liberación de los encarcelados que consideran «presos políticos» y la restitución de unos poderes constitucionales de los que fue despojado el Parlamento.
Y para el oficialismo el levantamiento de las sanciones económicas que pesan sobre algunos de sus funcionarios y el reconocimiento de la Asamblea Constituyente, un órgano plenipotenciario integrado solo por oficialistas y no reconocido por numerosos gobiernos.
Horas antes del inicio de la reunión, el diputado opositor Luis Florido señaló hoy en su cuenta de Twitter que «un cambio de gobierno es necesario para frenar la crisis en el país», y que exigen «un acuerdo que permita elecciones libres en Venezuela«, al tiempo que destacó que «entre el primer encuentro y este tercero, el Gobierno de Maduro muestra una mala fe que es insensible a la crisis».
En las últimas horas también se han referido a este diálogo los cancilleres de Chile y México, que son los países observadores a instancias de la oposición, mientras que Bolivia, Nicaragua y San Vicente y Granadinas son los invitados por el Gobierno de Nicolás Maduro.
El canciller chileno, Heraldo Muñoz, confirmó su participación en la reunión de mañana en su cuenta de Twitter, pero señaló que «si no hay resultados concretos y creíbles ya, entonces no tendrá ningún sentido seguir adelante».
Mientras que el canciller mexicano, Luis Videgaray, dijo esta semana que su país buscará promover una solución a la crisis venezolana, pero siempre y cuando las condiciones para su participación como observador en este proceso sean «idóneas».
Por su parte, Delcy Rodríguez, exigió hoy «sindéresis y seriedad a los acompañantes del diálogo para que respeten códigos previamente acordados en el cumplimiento de su labor», y afirmó que Heraldo Muñoz «en las postrimerías de su cargo como canciller opta por la triste puerta trasera y sirve a bajos intereses estadounidenses».
El diálogo se inició formalmente el 1 de diciembre, después de que quedaran en el aire durante varias semanas las conversaciones de septiembre, y al término de las conversaciones del pasado 15 de diciembre, ambas partes destacaron los avances, pero reconocieron que necesitaban más tiempo para llegar a un acuerdo.
En el marco de ese diálogo fueron liberados la víspera de Nochebuena 44 políticos presos en Venezuela, una de las solicitudes que ha hecho la parte opositora en esas conversaciones, aunque todavía se exige la excarcelación de más de 200 antichavistas privados de libertad.
Hasta ahora no se ha detallado en que asuntos se ha avanzado en este proceso de diálogo, ya que según explicó el presidente Medina al término de la reunión del pasado 15 de diciembre hasta que «no se aborde el conjunto total de los temas y se llegue a acuerdos o desacuerdos sobre ellos no podemos anunciar ninguno porque de un tema depende el siguiente».