Comienza la última jornada de las elecciones legislativas rusas
EFE
Los primeros colegios electorales abiertos en Rusia durante tres días con motivo de las elecciones parlamentarias cerraron hoy sus puertas en el Lejano Oriente, mientras que en la parte europea lo harán nueve horas más tarde.
Las regiones de Kamchatka y Chukotka fueron las primeras en dar por concluidas las elecciones.
Además de diputados a la Cámara Baja rusa, en Chukotka y Kamchatka se eligieron entre el viernes y este domingo a representantes de los parlamentos regionales.
A nivel nacional los primeros resultados de las elecciones a la Duma rusa, en las que se renuevan los 450 escaños, se darán a conocer después de las 18.00 GMT cuando hayan cerrado los últimos colegios en la región de Kaliningrado, según adelantó el vicepresidente de la Comisión Electoral Central, Nikolái Buláeav.
Más de 5.800 candidatos de 14 partidos, incluidos 10 aspirantes independientes, se postulan en estos comicios.
Además de los diputados de la Duma, los votantes eligen a 12 jefes de entidades federadas y 39 parlamentos regionales.
A las 07.00 GMT la participación en las elecciones alcanzaba el 35,69 %, según la presidenta del órgano electoral, Ella Pamfílova.
En las legislativas de 2016 la participación ascendió al 47,88 %.
El partido del Kremlin, Rusia Unida, busca renovar la mayoría constitucional -más de 330 escaños- que logró en 2016 con 334 asientos.
Según el último sondeo del Centro de Estudio de la Opinión Pública (Vtsiom) -cercano al Kremlin-, Rusia Unida tiene una intención de voto del 29,3 %, seguido de los comunistas con un 16,6 %.
Podrían repetir en el Parlamento los ultranacionalistas del Partido Liberal Democrático y la coalición socialdemócrata de Rusia Justa, mientras alberga algunas opciones la formación de nuevo cuño Gente Nueva.
Con la excepción del partido liberal Yábloko, la oposición extraparlamentaria liderada por Alexéi Navalni, encarcelado en febrero a dos años y medio, no participa en los comicios.
En su mayoría, los candidatos de la oposición radical no pudieron registrarse debido a diferentes trabas, desde acusaciones de extremismo hasta la posesión de activos en el extranjero.
Según la CEC, sólo 250 observadores extranjeros, en su mayoría de antiguas repúblicas soviéticas, vigilan los comicios.
La Oficina de la OSCE sobre Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR) se negó a supervisar las elecciones parlamentarias rusas ante la decisión de Rusia de reducir de medio millar a 60 el número de observadores.
