Cierre de empresas deja a 400 mil venezolanos sin empleo
Agencias
Más de 10 puntos ha contraído el Producto Interno Bruto (PIB) que aportaba el sector industrial a Venezuela desde el 2014 a la fecha, así lo informó Adán Celis, presidente de Conindustria. El balance representa que la cantidad de bienes y servicios que las empresas de manufactura producían cuando Nicolás Maduro llegó al poder se ha desplomado, y el sector se ha empequeñecido de tal manera que el 60 % de sus trabajadores han quedado desempleados, forzados a depender de la economía informal o migrar para sobrevivir.
«Nosotros llegamos a ser casi el 19 % del PIB del país, ahora somos menos del 10 %, y eso se traduce a que se han acabado los empleos seguros para la nación que los daba el sector industrial, que históricamente ha pagado los mejores salarios», apuntó. En siete años la industria pasó de tener 700 mil trabajadores directos, que se traducen a dos millones 800 mil familias dependiendo de ingresos derivados del sector, a menos de 300 mil empleos en el 2021. «Son 400 mil trabajadores menos y un millón 600 mil familias desamparadas económicamente por el cierre de fuentes de trabajo», resaltó.
Aunque Conindustria está elaborando el balance de coyunturas económicas que presentarán al finalizar marzo, para evaluar cuántas industrias cerraron en 2020, año de pandemia y de paralización económica, el pasado 23 de noviembre Celis declaró a LA PRENSA que las proyecciones eran aproximadamente de 1200 industrias que podrían haber cerrado el año pasado.
Precisó que en 1998, cuando Chávez llegó al poder operaban 12.700 industrias, hasta el primer semestre de 2020 quedaban 2.500 industrias activas en el país.
Urgen resultados
Conindustria es parte de los 15 sectores económicos que integran Fedecámaras, cúpula empresarial que desde hace un mes sostiene un diálogo con la Asamblea Nacional electa el 6 de diciembre y dominada por el gobierno. Apunta que los empresarios han puesto sobre la mesa cinco propuestas fundamentales para reactivar la economía, y que esperan acciones rápidas del gobierno, porque el gremio no está dispuesto a darle largas a un proceso sin resultados.
«Solicitamos que se evalúe el tema arancelario que impulsa la competencia injusta de parte de importadores de productos terminados, que no pagan impuestos y no tienen ni controles sanitarios. Hemos pedido que se levante el encaje legal para que las empresas puedan recibir créditos bancarios. Solicitamos que la importación de gasolina y diésel pase a manos de privados ya que el gobierno no puede dar respuestas a estos servicios, que se mejore el servicio eléctrico y que se respete la propiedad privada, que permita procesos transparentes de privatizaciones», comentó.
Con información de La Prensa de Lara