Chavismo vuelve a marchar ante sanciones de EEUU
EFE
Chavistas volvieron a manifestarse este sábado en las calles ante las sanciones que Estados Unidos (EEUU) impuso contra su Administración, en una jornada que contó con la asistencia de trabajadores de distintas partes del mundo.
Bajo el lema «¡No more Trump!» los chavistas expresaron una vez más su rechazo al «imperialismo norteamericano» y al presidente estadounidense, Donald Trump, al que acusan de estar detrás de los problemas que atraviesa el país.
La marcha formó parte del cierre del «primer encuentro internacional de trabajadores y trabajadoras» que realizó el gabinete de Maduro en busca de apoyos contra las sanciones de EEUU, y estuvo encabezada por el constituyente Francisco Torrealba y el jefe de movilización del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Darío Vivas.
«Aquí vino gente de Francia, gente de Portugal, gente de Inglaterra, gente África, de Nigeria, de Argelia, de varios países», dijo Torrealba desde la manifestación al señalar que estos trabajadores le expresaron su apoyo a Maduro.
«Aprobamos (…) un plan de lucha para hacer retumbar en todas partes del mundo, nuestra voz de protesta que acompañan nuestros hermanos y hermanas trabajadores desde sus sindicatos para decirle: ¡no! al bloqueo genocida de los EEUU de norteamérica contra el pueblo venezolano», agregó.
Según Torrealba, se encuentran planificando para el próximo año un «congreso mundial contra el imperialismo» con todos los sindicatos del mundo.
En la manifestación que recorrió el centro de Caracas hasta llegar al palacio presidencial de Miraflores, participaron los miembros de la milicia de Venezuela, trabajadores públicos e integrantes de los movimientos sociales del chavismo.
Desde la marcha, la abogada Luz Solani pidió a las Naciones Unidas ayudar a «levantar» el bloqueo» de EEUU.
«Aquí estamos presentes y consecuentes para activar la paz y para decirle a Dondal Trump que no lo queremos más», añadió.
El pasado 5 de agosto, el presidente estadounidense impuso nuevas sanciones a los bienes del régimen de Nicolás Maduro en territorio estadounidense, en un nuevo paso en el intento de deponer a Maduro como mandatario.
La medida ha sido calificada por el Ejecutivo de Maduro como «una nueva y grave agresión» de «terrorismo económico».