Cataluña reabre sus oficinas diplomáticas en Washington
EFE
El conseller de Acción Exterior del Gobierno de Cataluña, Ernest Maragall, reabrió este jueves las oficinas diplomáticas cerradas hace un año por el Gobierno español tras el referéndum ilegal secesionista promovido en esa región del este de España.
El ministerio de Exteriores español divulgó el pasado día 9 un informe desfavorable sobre la apertura de nuevas delegaciones de la Generalitat de Cataluña en el extranjero al considerar que se utilizarían «para apoyar fines manifiestamente contrarios a los principios y objetivos de la política exterior de España».
«Tras un año de oscuridad, hoy empieza un periodo larguísimo de luz intensa y horizonte ancho, que quiere decir mucha presencia, mucho trabajo, con una ambición legítima», dijo Maragall a periodistas tras dar por reabierta la delegación catalana en Washington, la primera de esa región española fuera de Europa.
Maragall entregó el liderazgo de esta representación diplomática a Victòria Alsina, que toma el relevo de Andrew Davis, el que fuera delegado de la Generalitat en Estados Unidos hasta su destitución hace un año.
Alsina consideró el nombramiento un «orgullo» y dijo que su primera función será «recuperar la normalidad».
El conseller también señaló que Alsina y la delegación trabajarán «con la expectativa de que Cataluña cuente con un reconocimiento de su condición de país».
«La agenda catalana está clara, en Washington es exactamente la misma que la agenda en Barcelona (…) No nos resignamos a ningún tipo de silencio», añadió.
Maragall explicó que esta agenda pasa en estos momentos por términos como «democracia y libertad», y que una de las funciones de la delegación será difundir la situación de los políticos independentistas que están presos acusados de sedición y malversación por el referéndum secesionista ilegal del 1 de octubre del pasado año.
El ministro español de Exteriores, Josep Borrell, dijo el pasado día 9 que el Gobierno de Madrid sólo recurrirá a los tribunales cuando las actuaciones que se desarrollen desde las oficinas catalanas «sean contrarias a la ley».
Borrell ha defendido el contenido del informe de su Ministerio porque considera que la apertura de esas delegaciones no se corresponde con la estrategia de la política exterior del Estado.
Maragall se reunió hoy con el congresista republicano Mario Díaz-Balart -que en marzo de 2017 ya recibió al ex presidente catalán Carles Puigdemont- y dijo que próximamente habrá nuevos contactos con miembros del Congreso y del Gobierno de EE.UU.
El conseller de Acción Exterior también anunció que la semana que viene el gobierno regional aprobará la apertura de seis nuevas delegaciones diplomáticas.