«Nosotros vamos a terminar la expansión del Canal de Panamá, eso es lo primordial. Nos faltan once meses porque el primero de abril (de 2016) el Canal va a estar abierto a la navegación internacional», dijo Roy a periodistas.
Desde 2007 el Canal de Panamá se encuentra en fase de expansión para que buques de hasta 14.000 contenedores, el triple de su capacidad actual, puedan atravesar sus 80 kilómetros.
Con la ampliación podrán pasar por el Canal los nuevos buques postpanamax, de más de 400 metros de largo y 50 de ancho, equivalentes a cuatro campos de fútbol.
«Ahora lo que hay que hacer es pisar el acelerador y terminar» las obras, añadió Roy
Las obras, que llevan un año de retraso, tienen un costo estimado de 5.250 millones de dólares.
El consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC), que ejecuta el principal contrato del proyecto, instaló este martes la última de las 16 compuertas que conforman el proyecto.
Con la colocación de las compuertas, y tras un mes aproximadamente de pruebas electromecánicas, la nueva ruta ya podrá comenzar a inundarse de forma progresiva para comenzar posteriormente las prácticas con embarcaciones.
GUPC, integrado por la española Sacyr, la italiana Salini Impregilio, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana, entregará la obra a principios de 2016.
Las obras, que tienen cerca de 90% de avance, llevan un año de retraso debido a diversas disputas entre GUPC y la Autoridad del Canal de Panamá, además de varias huelgas de trabajadores. El costo final del proyecto es incierto debido a los reclamos del consorcio.
Por el Canal panameño, cuyos principales usuarios son Estados Unidos y China, pasa el 5% del comercio marítimo mundial.