Buscan nuevos datos sobre cómo se separó la Antártida de América del Sur
EFE
Un equipo de investigadores de la Universidad de Granada busca nuevos datos sobre cómo se separó la Antártida de América del Sur hace 35 millones de años, un proyecto que desarrollan desde un buque oceanográfico para identificar procesos tectónicos y cambios climáticos de aquella época.
Científicos del departamento de Geodinámica y del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (UGR-CSIC) se han trasladado hasta la Antártida a bordo del buque de investigación oceanográfica Hespérides para iniciar su proyecto y descifrar los fenómenos que provocaron la separación de continentes.
Después de apoyar a las bases españolas en la Antártida y pasar por la Isla Livingston y la Isla Decepción, los científicos empezarán con una campaña de geología marina denominada «Powell 2020» que busca identificar las edades de los principales eventos y procesos tectónicos, oceanográficos y climáticos que se registraron hace unos 35 millones de años.
La formación del Paso del Drake entre ambos continentes permitió que se estableciera la Corriente Circumpolar Antártica (CCA), una corriente que fluye alrededor de la Antártida y que conecta todos los océanos meridionales.
Conocer cómo se estableció y cuál es su relación con la evolución climática global y los casquetes de hielo Antárticos resulta fundamental para entender el clima del presente.
Durante la campaña «Powell 2020», los investigadores de la Universidad de Granada realizarán estudios geofísicos para analizar la estructura de la corteza terrestre y de los procesos tectónicos que llevaron a esas estructuras.
Sumarán además estudios geológicos que ayudan a conocer las condiciones ambientales y climáticas del pasado, en particular entre 35 y 17 millones de años.
En la campaña «Powell 2020» participan 22 investigadores de la Universidad de Granada (UGR), del IACT, del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y otras instituciones españolas y extranjeras como la Stanford University y Colgate University de Estados Unidos, la Royal Holloway de Londres o la Victoria University of Wellington de Nueva Zelanda.
A principios de febrero toma el relevo otro grupo de la UGR liderado por Javier Almendros, investigador del Instituto Andaluz de Geofísica, que con otros 23 investigadores de distintos centros y nacionalidades se embarcará en el Hespérides para investigar los volcanes submarinos del Estrecho de Bransfield.
Los datos de los dos equipos se sumarán a los que cosechen los miembros del Instituto Andaluz de Geofísica Alejandro Moreno y Joan Parera, que desde el 20 de diciembre realizan un seguimiento de la actividad sismo-volcánica de la isla Decepción, labor fundamental para la seguridad y el correcto funcionamiento de la base antártica española «Gabriel de Castilla».