Brasil dice que «cerrará filas» con Argentina para buscar salidas a la crisis
EFE
El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, afirmó este lunes que «cerrarán filas» con el Gobierno de Argentina a fin de «buscar las mejores soluciones» a la crisis económica que enfrentan ambos países por el coronavirus, en una nueva muestra de distensión con el país vecino.
«Nuestra visión es que vamos a cerrar filas con el Gobierno argentino y buscar las mejores soluciones para todos», dijo Mourao en un encuentro con medios de comunicación internacionales.
El vicepresidente subrayó que Argentina es un socio económico «fundamental» y que la delicada situación económica de ese país ha lastrado el comercio exterior de Brasil, especialmente en el sector industrial.
«Brasil apoya todo lo que pueda ser realizado en el sentido de apoyar a Argentina en la búsqueda de soluciones para los problemas que el país afronta en el área económica», indicó.
El general de la reserva del Ejército destacó que los dos países, junto con Uruguay y Paraguay, son socios del Mercosur y comparten una «historia en común» y una «frontera importante».
Para Mourao, la llegada de la pandemia, que en Brasil ya deja casi 95.000 muertes y 2,7 millones de contagios, «dificultó» el «proceso de distensión» entre ambos gobiernos, especialmente entre el presidente de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, y su homólogo argentino, el peronista Alberto Fernández.
Las fricciones entre Bolsonaro y Fernández comenzaron durante la campaña electoral de 2019 en Argentina, un período en el que el presidente brasileño apoyó abiertamente el frustrado intento de reelección de Mauricio Macri.
Esas diferencias se acentuaron una vez que Fernández ganó las elecciones, con la decisión de Bolsonaro de no felicitarle por su triunfo ni acudir a su investidura, a la que sí fue el vicepresidente Mourao.
«Es extremadamente simpático, conversamos rápidamente», recordó Mourao este lunes a la prensa internacional.
El deshielo de la relación bilateral empezó este año con una reunión en febrero entre el canciller brasileño, Ernesto Araújo, y su homólogo argentino, Felipe Solá; y un mes después con un encuentro entre Bolsonaro y el jefe de la Cámara de Diputados de Argentina, Sergio Massa.