Bolivia pide a España informe sobre los agentes implicados en suceso diplomático
EFE
La Fiscalía General del Estado de Bolivia envió una nota a la Cancillería del país para solicitar un informe a las autoridades de España sobre la presencia de los agentes que estuvieron implicados en el incidente que derivó en la expulsión de dos diplomáticos españoles y la embajadora de México.
«La Fiscalía General ha enviado una nota a la Cancillería para que, por vía diplomática, comunique a las autoridades españolas la remisión de un informe oficial señalando las identidades de estas personas, con qué pasaporte ingresaron a territorio boliviano», señaló este miércoles el fiscal general boliviano, Juan Lanchipa.
También se busca conocer «qué autoridad solicitó la presencia de este grupo especializado y sobre todo el motivo por el cual se hizo presente este grupo del GEO (Grupo Especial de Operaciones) en nuestro país», dijo Lanchipa, citado en un comunicado de su oficina.
La Fiscalía boliviana anunció el pasado viernes el inicio de una investigación para verificar si estos funcionarios españoles ingresaron y permanecieron en Bolivia con pasaportes falsos, lo que supondría una vulneración a la soberanía del país, según el Ministerio Público.
El Gobierno interino de Bolivia decidió el pasado 30 de diciembre declarar personas no gratas a los diplomáticos españoles Cristina Borreguero y Álvaro Fernández, junto a otros funcionarios y la embajadora de México, María Teresa Mercado.
El motivo fue la visita el pasado 27 de diciembre de los diplomáticos españoles acompañados, según el Gobierno boliviano, de individuos «encapuchados» y «presumiblemente armados» a la residencia de la embajada de México en La Paz, donde están asiladas exfuncionarios del Ejecutivo de Evo Morales.
El suceso fue interpretado por el Gobierno interino boliviano como un intento de evacuar a esos exfuncionarios, algo que el Ejecutivo español ha negado en todo momento, al asegurar que se trató de una visita de «cortesía» y que los diplomáticos iban acompañados de «personal de seguridad» para su propia protección.
El Gobierno español expulsó el mismo 30 a tres diplomáticos bolivianos acreditados en España «en reciprocidad al gesto hostil» del Ejecutivo interino boliviano de expulsar a la delegación española implicada en el incidente.
Tras las tensiones, el Gobierno interino boliviano decidió designar a su vicecanciller, Gualberto Rodríguez, nuevo encargado de Negocios en España con el fin de superar los roces.
De la misma forma, la presidenta Jeanine Áñez felicitó al jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, después de su elección en el Congreso de los Diputados y le manifestó su «disposición» a fortalecer las relaciones entre ambos países.