Basílica de Santa Teresa recibirá desde este lunes las orquídeas para el Nazareno de San Pablo
A partir del lunes santo, los fieles podrán llevar las acostumbradas orquídeas para decorar el Nazareno de San Pablo, en la Basílica Santa Teresa, ubicada en El Silencio, Caracas, imagen que data del siglo XVI.
El sacristán Ángel Ramírez, en entrevista para Correo del Orinoco, indicó que este año esperan superar las 3.000 orquídeas recibidas en el año 2014.
Las misas oficiadas por obispos y sacerdotes invitados comenzarán el miércoles, día de la procesión, a las 12 de la medianoche y se realizarán cada hora.
Al finalizar la misa de las cuatro de la tarde, la procesión del Nazareno saldrá de la Basílica en dirección a la esquina Cipreses, en la avenida Lecuna, y continuará por la avenida Baralt hasta regresar al templo.
El jueves santo está programada una misa para las nueve de la mañana, el santo rosario a las tres de la tarde y la misa de la cena del Señor a las 4:30 de la tarde.
El sermón de las siete palabras se hará a las 11 de la mañana del viernes santo, el vía crucis a las 2:30 de la tarde, la conmemoración de la pasión del Señor a las 4:00 de la tarde y la procesión del santo sepulcro a las 6:00 de la tarde.
El vicario parroquial Robin Zambrano advirtió, para Correo del Orinoco, que de acuerdo a la fe católica este día debe guardarse ayuno y abstinencia, norma que exime a mayores de 65 años.
Para cerrar la celebración de la Semana Mayor, el sábado se realizará la vigila a las 6:30 de la tarde y el domingo de pascua, cuando se festeja la resurrección de Cristo, se hará la última misa a las 10:30 de la mañana.
Por otra parte, Zambrano señaló que está prohibido llevar velas encendidas, a propósito del incidente ocurrido en 1952, donde hubo 50 personas fallecidas.
Asimismo, recomendó evitar llevar niños debido a las aglomeraciones que se forman.
Un 9 de abril de 1952 durante una misa de los días santos, una persona se alarmó ante la llamarada que produjo el roce del velo de una feligresa con una vela encendida, y a su voz de sobresalto “¡Incendio!”, los presentes comenzaron a correr tratando de escapar del templo.
La estampida, sumada al estancamiento de personas en las puertas de la Basílica que se encontraban cerradas, dejó como resultado la asfixia y el aplastamiento de decenas de personas.
Info de AVN