Bajar la velocidad en Francia ha permitido evitar 127 muertes
EFE
La reducción de la velocidad en las carreteras de un carril por sentido en Francia a 80 kilómetros por hora explica en gran medida que en el segundo semestre de 2018 hubiera 127 muertes menos accidentes de tráfico en ese tipo de vías que en el mismo periodo de 2017.
Ese es el análisis que hizo este miércoles el organismo oficial de la Seguridad Vial al presentar los datos de la siniestralidad en carretera en 2018, el año con las cifras más bajas desde que existen registros en Francia.
Un total de 3.488 personas perdieron la vida en accidentes de tráfico, lo que significa 196 menos que en 2017 y una caída del 5,3 %.
La caída fue significativa para los automovilistas (-7 % con 1.637 fallecimientos), los motociclistas (-6 % con 627), los peatones (-3 % con 471) y los camioneros (44, siete menos).
Por el contrario, aumentaron las muertes de ciclistas (175, dos más) y de conductores de cinclomotores (133, 16 más).
El descenso de la siniestralidad tuvo su reflejo en el número de accidentes corporales (disminuyeron un 4,7 %) y en el de heridos (-4,7 %).
Según la Seguridad Vial, la velocidad excesiva o inadecuada continuó siendo la primera causa de mortalidad en las carreteras, presente en un tercio del total de los casos. Le siguieron, por este orden, el abuso del alcohol, la conducción bajo los efectos de estupefacientes, no respetar las prioridades y la falta de atención.
El 1 de julio del pasado año entró en vigor en Francia la reducción de 90 a 80 kilómetros por hora del límite de velocidad en las carreteras de un carril por sentido, una medida muy contestada y que fue objeto de críticas acerbas por parte del movimiento de los «chalecos amarillos».
De hecho, desde que éste comenzó su protesta en noviembre, el fenómeno de destrucción de radares -que ya había empezado meses antes- se aceleró y eso tuvo como efecto una ralentización en el descenso de la mortalidad en los dos últimos meses del año, señaló el organismo gubernamental.
