Atentado suicida en Kabul deja al menos 24 muertos; Los talibanes reivindican el ataque
The Associated Press
Un coche bomba explotó el lunes por la mañana en Kabul tras embestir a un minibús que llevaba a empleados del gobierno, matando a 24 personas e hiriendo a otras 42, según la policía. Los talibanes reclamaron la autoría del ataque.
El suceso ocurrió en hora punta en un barrio en el oeste de Kabuldonde viven varios políticos destacados, cuando la gente acudía a trabajar y los estudiantes llegaban a una escuela secundaria privada cercana, indicó el portavoz jefe de la policía de Kabul, Basir Mujahed.
“El agresor atacó uno a una de las horas más transitadas del día”, dijo el portavoz. “Había atascos de tránsito de gente que iba a trabajar y a la universidad y a las escuelas. Muchas de las tiendas acababan de abrir”.
El autobús quedó destruido por completo, al igual que otros tres coches y varias tiendas de la zona, señaló Mujahed, añadiendo que había niños entre los heridos.
El Ministerio afgano del Interior tachó el suceso de “ataque criminal contra la humanidad” en un comunicado.
Los talibanes dijeron estar detrás del ataque y dijeron que lo había ejecutad un insurgente llamado Ahmad, según un comunicado enviado a los medios.
El objetivo del ataque eran los servicios de inteligencia y sus empleados, afirmó el portavoz talibán Zabihullah Mujahid. El vocero dijo que el minibús estaba lleno de empleados de los servicios de inteligencia y que insurgentes talibanes llevaban dos meses siguiendo a trabajadores del organismo para preparar el ataque.
El presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, condenó el atentado.
“Una vez más, estos terroristas atacan a civiles y atacan a personal del gobierno”, dijo en un comunicado.
Se trata del segundo ataque contra empleados del mismo ministerio. El año pasado, varias personas murieron en otro atentado contra un autobús que llevaba a varios trabajadores.
En el oeste de Kabul viven varios políticos importantes como el líder de la comunidad hazara Mohammad Mohaqiq. La zona ha sufrido varios ataques, incluido el atentado suicida en el que murió el clérigo chií Ramazan Hussainzada el mes pasado, también miembro destacado de la población de etnia hazara.
La explosión del lunes reventó las ventanas de los edificios cercanos, haciendo que cayeran cristales sobre la calle, según los testigos.
“El sonido fue muy fuerte. La tierra tembló”, dijo Mohammed Nader, que tiene una tienda de alimentación en el barrio.