Astrónomos buscan cómo hallar el esquivo “Planeta Nueve”
Fuente: laopinion.com
Cuando a principios de 2016 se anunció por investigadores del Instituto Tecnológico de California (Caltech) el hallazgo de evidencias sobre la existencia de un nuevo planeta que formaría parte del Sistema Solar, la prueba de la existencia del llamado “Planeta X” o “Planeta 9” eran cálculos matemáticos y simulaciones de computadora que explicaban fenómenos astronómicos causados por la posible la existencia de un noveno planeta en el Sistema Solar.
Nadie ha encontrado el misterioso planeta todavía, pero eso no ha impedido a los científicos especular sobre cómo un planeta así podría haber llegado allí.
Nuevas simulaciones, presentadas esta semana en la reunión de Ciencia Astronómica Americana, sugieren que puede haber sido una vez un planeta solitario, atraído por nuestro sol.
Si está ahí fuera, el “Planeta 9” se espera que sea 10 veces el tamaño de la Tierra y se halle mil veces más lejos del sol. En comparación, Plutón es cerca de 40 veces más lejos del Sol que la Tierra, por lo que el Planeta Nueve es un extraño bastante grande. ¿Cómo llegó tan lejos?
Hay una posibilidad de que haya nacido en el medio de la nada. Pero el dúo que lidera la búsqueda del Planeta Nueve, el astrónomo Mike Brown y el astrofísico Konstantin Batygin, de Caltech opinan que puede ser un planeta desplazado. Según su teoría, el Planeta Nueve se formó cerca del sol, al igual que nuestros otros planetas, pero el vecindario ya estaba ocupado, por lo que el Planeta Nueve quedó muy alejado.
Otra posibilidad es que el Sistema Solar lo haya atraído. El Planeta Nueve puede haber comenzado como un planeta solitario, vagando por el universo sin una estrella que lo atrajera en su órbita, antes de que la gravedad de nuestro sistema solar lo capturara.
Los investigadores espaciales James Vesper y Paul Mason, de la Universidad Estatal de Nuevo México, han hecho una presentación en la reunión estadounidense de Ciencia Astronómica que sigue esta hipótesis.
Aún se compilan los datos y las simulaciones, pero la teoría que sostiene la existencia del misterioso planeta, está comprobada matemáticamente.