Así son los dos nuevos hoteles de Cristiano Ronaldo
ABC
El verano de 2016 quedará en la memoria de Cristiano Ronaldo para siempre. Su sueño de tener una cadena de hoteles con estilo se ha hecho realidad con dos edificios que ya funcionan a pleno rendimiento en Funchal (Madeira) y Lisboa, escalas previas a su desembarco en Madrid (Gran Vía) y Nueva York (cerca de Times Square).
Esta gran aventura suya como «business man» se realiza en colaboración con Pestana, marca líder del sector en Portugal, como demuestra al haberse hecho cargo de las «pousadas» (los paradores).
El administrador del grupo para Madeira y Azores, Paulo Prada, nos acompaña en un recorrido por el establecimiento de Funchal, dotado de un vestíbulo que parece una cafetería «fashion».
El museo consagrado a él (trofeos, documentos, medallas, fotografías de momentos míticos…) y una estatua en el exterior terminan de configurar un paisaje centrado en el culto a su personalidad.
Un tributo estético que se extiende, cómo no, al Pestana CR7 ubicado en la antesala de la Plaza del Comercio, en la capital portuguesa. Allí, en la esquina con la calle Prata, se alza un edificio que llama la atención de lisboetas y turistas.
En ambos hoteles, los pasillos están cubiertos con césped artificial. ¿Objetivo? Que los clientes se sientan como si pisaran el Santiago Bernabéu.
Las habitaciones están presididas por una moderna funcionalidad y unos tonos diáfanos que multiplican la sensación de amplitud. Las camas están arropadas con juegos de sábanas de seda «made in Portugal», pues se fabrican cerca de Viseu.
Los baños, con productos exclusivos, están dominados por un espejo que refleja el rostro de Cristiano con gafas de sol. Una imagen algo megalómana, pero que hace las delicias de sus fans.
De hecho, la experiencia de alojarse en los Pestana CR7 pretende asemejarse a «pasar una velada como» el excepcional delantero, incluido el «fitness» más a la última, que en Funchal puede practicarse al aire libre, al lado de la espectacular terraza con DJs que anima las noches de viernes y sábado.
Allí las reservas están disponibles desde 135 euros la noche, mientras que en Lisboa el umbral mínimo de precio se sitúa en 200 euros.
Son 49 habitaciones en la capital de Madeira y 82 en Lisboa, con unas «suites» donde los visitantes pueden dejarse llevar por el placer de la realidad virtual.