Armada de Ecuador rescató cuerpo de hispano-venezolano desaparecido en un río
Agencias
La Armada de Ecuador rescató el cadáver de un hispano-venezolano desaparecido el pasado 28 de febrero tras saltar junto a tres amigos al río Napo, en la zona centro-oriental del país, informaron hoy a Efe fuentes militares ecuatorianas.
El fallecido fue identificado como Juan Carlos Serrano Peña, de 18 años, y tenía doble nacionalidad, española y venezolana, precisó el teniente de navío Marcelo García, responsable de la zona donde se produjeron los hechos.
El militar indicó que la nacionalidad española del ahogado se conoció cuando los otros tres bañistas -dos argentinos y una francesa-, que tuvieron que ser rescatados por la Armada, entregaron a las autoridades el pasaporte del desaparecido.
Los hechos se produjeron el pasado miércoles cuando el personal naval en el retén de Misahuallí fue alertado de que cuatro personas se habían precipitado al río y se estaban ahogando.
Fue entonces cuando la Armada activó el protocolo SAR de búsqueda y rescate e inicialmente se envió una lancha piraña.
«Se pudo rescatar a tres pero el cuarto fue imposible debido a la corriente», indicó a Efe el teniente García, que añadió que luego se procedió a una intensa búsqueda que se prolongó hasta horas de la noche e incluyó la colocación de un trasmallo a unos 3 kilómetros y patrullajes terrestres por la orilla fluvial.
Al día siguiente, 1 de marzo, vecinos de la comuna aledaña de Puca Urco informaron a las autoridades del avistamiento de un cadáver flotando en la orilla.
«Posterior a esto se llamó a la Policía Nacional y a la Fiscalía para el levantamiento del cadáver», reveló por su parte el responsable de Comunicación Social de la Armada, Alexis Cevallos.
Consultado por Efe, el consulado español en Quito informó que está realizando las «gestiones con las autoridades ecuatorianas oportunas» en relación al caso.
El área donde se produjo el ahogamiento es un conocido balneario de la provincia de Tena, donde el río Napo es el principal atractivo y destino de bañistas. EFE