Árabes cooperarán para contrarrestar el apoyo de EEUU a Israel en El Golán - 800Noticias
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EFE

Los países árabes coordinarán una estrategia común para frenar las consecuencias que pueda tener la decisión de Estados Unidos de reconocer los Altos de Golán sirios como territorio soberano de Israel, anunció este viernes el ministro tunecino de Asuntos Exteriores, Khemaies Jhinaou.

En una declaración al término de la reunión ministerial previa a la celebración este domingo en Túnez de la cumbre anual de la Liga Árabe, Jhinaoui explicó que el objetivo es que la propuesta hecha a principios de mes por el presidente norteamericano, Donald Trump, no cuaje en la arena internacional.

«Trabajaremos con nuestros colegas árabes y con el resto de la comunidad internacional para contener las repercusiones que se espera que esta decisión va a tener en foros regionales e internacionales», afirmó.

Fuentes diplomáticas participantes en la reunión señalaron a Efe, por su parte, que, además de impedir que estos foros se sumen a la propuesta de la Casa Blanca, el objetivo es trabajar directamente con Washington para que retire una decisión que consideran lesiva para la seguridad en la zona.

Los Altos del Golán es una cadena montañosa que se eleva desde el lago Tiberiades hacia la meseta de Siria que perteneció a ese país hasta 1967, cuandoue su cima y la cara oeste fue ocupada por el Ejército de Israel.

El Golán tiene un valor estratégico crucial ya que desde su cima se ve Damasco, desde entonces bajo la amenaza directa de los misiles israelíes, pero también Jerusalén, y la otras grandes ciudades de Palestina e Israel.

La polémica sobre el Golán se suma a la decisión adoptada por Trump nada más llegar a la Casa Blanca de reconocer Jerusalén como la capital del Estado de Israel, pese a que una importante parte de la ciudad es territorio ocupado palestino.

La reunión ministerial preparatoria también abordo este viernes otros asuntos que entrarán en la declaración final que se espera ratifiquen los jefes de Estado el domingo, como la guerra en Siria, el conflicto en Libia y la situación explosiva en Argelia, además del pulso político con Irán.

A este respecto, el ministro saudí de Asuntos Exteriores, Ibrahim al Assaf, volvió a plantear el escenario más duro al acusar una vez más a Irán, en particular a su Guardia Revolucionaria, de promover el terrorismo internacional.

En declaraciones a medios árabes, Al Assaf insistió en que el país persa «es la mayor amenaza a la que se enfrentan los árabes», por encima incluso de Israel, por lo que instó a los otros 21 Estados a trabajar unidos.

«Una de las formas más peligrosas de terrorismo y extremismo es la que practica Irán a través de su flagrante interferencia en los asuntos árabes, y de sus milicias», subrayó.

En particular, «la presencia de los Guardianes de la Revolución en países como Siria, Irak, el Libano y el Yemen requiere que cooperemos para hacerle frente», agregó el canciller saudí, cuyo país también tiene presencia militar en el Yemen y Siria, donde es un factor clave para la continuidad del conflicto.

Al respecto de la guerra que ha destruido este último país, Al Assaf insistió en que Riad defiende la integridad territorial de Siria -en alusión a las aspiraciones kurdas- e insiste en que la salida del conflicto debe realizarse a través del diálogo entre Damasco «y una oposición unificada».

Fuentes diplomáticas árabes que participan en la cumbre revelaron hoy a Efe que, pese a los esfuerzos realizados por Estados Unidos, durante la reunión de jefes de Estado del domingo no se levantará la suspensión de la membresía de Siria.

La reintegración de Siria cuenta con el visto bueno de un puñado de países y con la oposición de otros muchos, entre ellos la mayoría de las dictaduras de la península Arábiga.

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