Apuestan a inauguración del puente binacional de Tienditas

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Antes de agosto de 2015, cuando los puentes internacionales Simón Bolívar y el Francisco de Paula Santander estaban totalmente abiertos, se registraba la circulación de más de 16.000 vehículos diarios sobre los tramos binacionales.

La cifra, desprendida de un informe de Colombia al que tuvo acceso La Nación, precisa que el 10 % correspondía a vehículos de carga pesada; es decir 1.600 gandolas cruzaban por los pasos internacionales.

Este escenario, empujó a las autoridades de Venezuela y de Colombia a concretar la construcción del puente internacional de Tienditas, el cual tendría como objetivo principal descongestionar los tramos que conectan a San Antonio del Táchira con La Parada y a Ureña con El Escobal.

“El 27 de junio de 2013, Venezuela y Colombia, por intermedio del director del Instituto Nacional de Vías (Invías) y del viceministro de Infraestructura y Vialidad de la República Bolivariana de Venezuela, firman un acuerdo de cooperación para el proyecto de construcción del puente internacional de Tienditas”, reza parte del documento.

Tras tres años de trabajos, la obra fue concluida en noviembre de 2016 y, a la fecha, no ha sido inaugurada por los gobiernos de ambos países. El cierre de los puentes, el 19 de agosto de 2015, y la posterior ruptura de las relaciones diplomáticas, han dilatado el panorama.

Sin embargo, los recientes pronunciamientos del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, y de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, aumentaron las expectativas en torno a la reactivación comercial entre Táchira y Norte de Santander, así como la posibilidad de que el puente de Tienditas sea, por fin, estrenado.

Diario La Nación consultó a tres conocedores de frontera sobre la importancia del puente de Tienditas en esta nueva etapa que se avecina. El exalcalde y analista de frontera, William Gómez; el aduanero Ciro Amaya y el representante de la Cámara Colombo-venezolana Regional Oriente, Víctor Méndez, hicieron sus estimaciones.

Evitar embotellamientos

Tanto Gómez como Amaya y Méndez coincidieron en que el puente de Tienditas evitaría que se formen embotellamientos en la frontera, pues su inauguración generaría un gran respiro para los pasos formales de Ureña y San Antonio, una vez se habilite el tránsito de vehículos.

Si bien todo indica que a partir del 8 de agosto arrancaría el proceso de reapertura, la reactivación se iría presentando de forma gradual, y el tercer puente no se escaparía de ello, pues amerita ser adecuado a su figura binacional para que funcione a cabalidad.

“La gran ventaja del puente de Tienditas, ubicado en el municipio Pedro María Ureña, es su cercanía con San Antonio”, subrayó el exalcalde, al tiempo que recordaba que un paso formal internacional debe contar con los funcionarios pertinentes de cada lado, para que se dé el tránsito de vehículos y de personas.

“Falta la instalación de la tecnología adecuada para el desempeño de los organismos de Estado, como lo son los organismos de control aduanero, organismos de seguridad de Estado, organismos de seguridad ciudadana y organismos sanitarios, que permitan formalizar y cumplir con todos los elementos para ser decretado paso internacional formal”, enfatizó Gómez.

La gran envergadura del puente es un punto que resalta Amaya, sin olvidar que, del lado venezolano, hacen falta ciertos puntos concernientes a la infraestructura, donde funcionaría cada oficina.

“La vía está apta para el paso de vehículos y de personas. Sin embargo, no se puede olvidar factores como la instalación, por ejemplo, de la fibra óptica que le permita a los organismos e instituciones funcionar de la forma más idónea”, apuntó el aduanero.

Por tal motivo, Méndez, quien también representa al transporte de carga pesada en Norte de Santander, estima que el estreno de este puente podría tardarse algunos meses.

“Desde mi perspectiva, estaríamos hablando de unos seis meses para que todo quede listo para su inauguración”, puntualizó el gremialista, mientras insistía en una reapertura comercial sin restricciones, como se está dando actualmente en Paraguachón.

Pilotes aún fortalecidos

El analista de frontera y exalcalde del municipio Bolívar, indicó que el puente internacional Simón Bolívar, durante su gestión, fue revisado por técnicos del Ministerio del Transporte e ingenieros de la Alcaldía, determinando que los pilotes no presentan fallas, razón por la que el paso de gandolas de carga pesada sería posible por este punto.

“Este puente (Simón Bolívar) no representa ningún riesgo para el paso de vehículos. Lo que sí ayudaría el de Tienditas es a evitar los cuellos de botella que se formaban antes de 2015 por la gran movilidad”, aseveró.

Méndez comparte la misma visión de Gómez y resaltó que el Francisco de Paula Santander también se encuentra apto para la circulación de vehículos. “Solo harían falta algunos mantenimientos, del lado colombiano, y sobre todo en lo referente a  la placa superior, que no afectaría en nada el paso”, especificó.

El exalcalde agregó que la obra de Tienditas cuenta con tres puentes: dos ubicados en los extremos, con tres carriles cada uno, que serían usados para el paso de vehículos, y el del medio que se levantó para el paso de los peatones.

Los tres, Gómez, Amaya y Méndez, auguran una reapertura fronteriza por etapas y que tendría como punto de inicio la toma de posesión de Gustavo Petro, el domingo 7 de agosto.

El tercer puente

✓El puente de Tienditas fue construido entre el sector de Villa Silvania, en Cúcuta, y la localidad de Tienditas, en Pedro María Ureña .

✓La obra requirió, desde la concepción del proyecto, en 2013, de una inversión de US$ 32 millones.

✓Durante varios lustros, la idea del tercer puente estuvo deambulando hasta que agarró cuerpo en el año 2013.

✓La mitad del dinero lo puso Venezuela, mediante el Fondo Nacional de Desarrollo (Fonden) y la otra mitad, Colombia, a través del Instituto Nacional de Vías (Invías).

✓Los contenedores aún se divisan sobre el puente de Tienditas.

✓La obra reclama, a gritos, su inauguración.

✓Tiene una longitud de 280,10 metros, 10 metros de ancho de calzada, y una luz entre pilas de 140 metros, construido por dovelas, con el sistema de carros de avance

Con información de LaNaciónWeb