Aprendió a leer a los 2 años y cuenta los números en seis idiomas
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La inteligencia se va desarrollando durante los primeros años de la vida de un humano, cuando somos bebés. La mayoría siguen un curso predecible en su aprendizaje. Aprender a caminar, a balbucear, a leer o a sumar y restar les lleva más de cinco años de media. Sin embargo, de vez en cuando aparece un bebé que demuestra ser un genio.
Este es el caso de Teddy, un niño de cuatro años, que vive en la localidad de Portishead, Reino Unido. Como cuenta la BBC, con tan solo dos añitos, aprendió a leer por sí mismo, “viendo la televisión infantil y copiando los sonidos de las letras”, explica su madre, Beth Hobbs. Nunca los programas infantiles habían sido tan efectivos.
Su madre se dio cuenta de que su hijo “comenzó a trazar las letras y, cuando lo enviamos de regreso a la guardería después del cierre por Covid-19, les dijimos a los profesores que pensábamos que había aprendido a leer por sí mismo”. A los pocos días, recibieron una “llamada telefónica de la guardería, de un maestro de preescolar para verificarlo, y que confirmó que ‘¡sí, puede leer!’”.
Aprendió a contar en seis idiomas él solo
Esto asombró a sus padres, que no tenían ni idea de cuándo había comenzado su hijo a leer. Lo mejor vino después, cuando el pequeño Teddy fue sorprendido en su habitación haciendo unos sonidos extraños. “Estaba jugando en su tableta, haciendo estos sonidos raros que no reconocí, y le pregunté que qué era, y dijo: ‘Mami, estoy contando en mandarín’”, explicó su madre, que todavía no sale de su asombro.
Y es que Teddy, con tan solo cuatro añitos que tiene en la actualidad, ya ha aprendido a contar hasta 100 en seis idiomas diferentes al inglés, incluido el mandarín. Este rápido avance educativo y su gran inteligencia lo llevó a ser aceptado en la organización Mensa de superdotados con tan solo tres años. Actualmente, es el miembro más joven de la asociación en Reino Unido.
Para poder entrar a la asociación Mensa, que tiene más de 140.000 miembros en todo el mundo, debes ser una persona que esté en el percentil 98 o superior en un test de inteligencia. No les importa ni la edad, ni la nacionalidad, ni la política, ni la religión, ni si se es pobre o rico. Simplemente, aceptan miembros extremadamente inteligentes, con el objetivo de establecer un ambiente social e intelectual estimulante para sus miembros.
Para entrar en Mensa debes estar en el percentil 98 o superior en un test
A pesar de haber ingresado a Mensa tan joven, toda una hazaña, sus padres quieren que Teddy tenga una vida normal, explicando que el pequeño “está comenzando a darse cuenta de que sus amigos aún no pueden leer y no sabe por qué, pero es muy importante para nosotros mantenerlo con los pies en la tierra”.
