¿Algún día la terapia genética podría eliminar al VIH?
Agencias
La terapia genética podría tener el potencial de erradicar el VIH en las personas infectadas con el virus, sugiere una nueva investigación con animales.
La ciencia se centra en el uso de los genes «receptores de antígenos quiméricos» (RAQ). En un trabajo de laboratorio con monos, esas células modificadas destruyeron a células infectadas con el VIH durante más de dos años, reportaron los científicos.
«En teoría, la meta es ofrecer inmunidad contra el VIH de por vida», dijo el coautor del estudio, Scott Kitchen, de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en Los Ángeles.
«Buscamos una cura», dijo. «Y sabemos que para curar el VIH se necesita una respuesta inmunitaria efectiva, que es lo que vemos aquí». Kitchen es profesor asociado de medicina en la división de hematología y oncología.
Los científicos han estado buscando una forma de crear inmunidad a largo plazo contra el VIH, el virus que causa el SIDA. Actualmente, la terapia antirretroviral se receta para mantener al VIH bajo control, pero no elimina el virus del cuerpo.
Kitchen explicó la nueva estrategia de la siguiente manera: «En términos de la inmunología básica, la células T son en gran parte responsables de nuestra capacidad de combatir a los patógenos y deshacernos de las infecciones en el cuerpo. De los tumores. De cualquier anomalía.
«Cada célula T tiene un receptor único, o molécula. Ese receptor permite a la célula T reconocer un objetivo específico: una bacteria, un hongo o un virus. Y cuando reconoce ese objetivo, entra en acción para eliminarlo del cuerpo», dijo Kitchen.
«Lo que hemos hecho es tomar receptores artificiales, o RAQ, que pueden ir a esas células y permitirles reconocer lo que queremos que reconozcan», anotó. «En este caso, se trata del VIH».
La meta es desarrollar «una vacuna inversa, en que diseñamos una respuesta inmunitaria para dirigirse al VIH», añadió.
El concepto de diseñar receptores de antígenos quiméricos se remonta a unos 20 años, según Kitchen. Y la terapia de células T con RAQ se ha anunciado como un tratamiento para una variedad de cánceres.
«Eso es bueno, porque significa que ya sabemos que es segura», dijo.
Lo novedoso es el uso doble del equipo de investigación de células madre y de RAQ para dirigirse al VIH.
Primero, el equipo diseñó genéticamente a los RAQ para encontrar y vincularse con el virus de inmunodeficiencia simia-humana (VISH), un híbrido de VIH diseñado en el laboratorio compuesto de un virus humano y un virus de mono.
Entonces, los investigadores modificaron el ADN de ciertas células madre que forman la sangre para que portaran al RAQ que mata al VISH.
Las células resultantes se introdujeron en el torrente sanguíneo de cuatro monos macacos machos jóvenes infectados con el VISH.
Las células modificadas se instalaron con éxito en la médula ósea de cada mono. Las células se movieron ampliamente por el cuerpo, dirigiéndose y matando a las células infectadas con el VISH, sin producir ningún efecto secundario adverso notable, reportaron los investigadores.
«La ventaja del método basado en células madre es que una vez esa células se injertan en el cuerpo, producen de forma continua nuevas células T que portan ese gen que puede dirigirse a las células con VIH», explicó Kitchen.
Se están creando planes para un ensayo en humanos, que podría comenzar en dos o tres años, dijo Kitchen.
«Por supuesto, hay un gran salto al pasar de estudios con animales a estudios con humanos», advirtió. Pero «este estudio muestra que esas células responden al VIH y que es seguro».
Tampoco es probable que esta estrategia funcione del todo por sí sola, añadió Kitchen, y anotó que «el VIH es altamente complejo. No habrá una panacea».
Kitchen planteó que lo más probable es que los RAQ tengan que usarse junto con la terapia antirretroviral.
Marcella Flores, directora asociada de investigación en amfAR (The Foundation for AIDS Research), que ayudó a financiar el estudio, expresó tanto entusiasmo como precaución.
«La terapia con RAQ ya está conduciendo a resultados impresionantes en el cáncer, y es promisoria para la erradicación del VIH», anotó.
Pero Flores enfatizó que las condiciones del estudio actual «no representan a las condiciones de la ‘vida real'». Aunque estos estudios con monos tienen implicaciones importantes para los resultados con humanos, dijo que los resultados en humanos podrían ser muy distintos.
Por MedlinePlus