Al menos 37 muertos en ataque talibán contra aeropuerto afgano de Kandahar
AFP.- Al menos 37 personas murieron y 35 resultaron heridas en el ataque talibán contra el aeropuerto de Kandahar, la gran ciudad del sur de Afganistán, anunció el miércoles el ministerio de Defensa.
«Nueve atacantes murieron, uno está herido y otro continúa luchando contra nuestras fuerzas», indicó el ministerio, que aclaró que el ataque fue llevado a cabo por un comando de once personas.
El ataque de los talibanes contra el aeropuerto de Kandahar, la gran ciudad del sur de Afganistán, coincidiendo con el viaje a Pakistán del presidente Ashraf Ghani, que intenta reactivar el diálogo de paz con los insurgentes.
Los talibanes atacaron en la noche del martes el gigantesco complejo aeroportuario, que alberga además una zona residencial civil y una base militar conjunta de la OTAN y el ejército afgano.
Durante la feroz batalla, soldados afganos imploraron a los talibanes que dejaran partir a las mujeres y los niños, contaron habitantes.
Se trata del segundo ataque en 24 horas en Kandahar, cuna de los talibanes.
Un comandante del ejército en Kandahar, Dawood Shah Wafadar, comunicó por su parte un balance de 18 muertos.
Un número indeterminado de talibanes murieron durante el asalto, afirmó el gobierno este miércoles.
El miércoles por la mañana seguían escuchándose tiroteos y explosiones, según habitantes del aeropuerto.
Los talibanes reivindicaron el ataque, lanzado después de varios días de conjeturas sobre la suerte de su jefe, Ajtar Mansur.
Ajtar Mansur fue gravemente herido, según varias fuentes, en una reunión de dirigentes que degeneró en un tiroteo.
La ofensiva de los talibanes coincidió con la visita a Pakistán del presidente afgano, Ashraf Ghani, que participa en Islamabad en la conferencia regional Heart of Asia.
La decisión de Ghani de viajar a Pakistán deja esperar un avance para el reinicio de negociaciones de paz entre el gobierno afgano y los talibanes, bloqueadas en parte por la desconfianza que existe entre Kabul e Islamabad.
Pakistán, que ejerce una fuerte influencia sobre los talibanes, a los que apoyó en el pasado, recibió en julio pasado una primera rueda de negociaciones.
Pero esos contactos se suspendieron después de que los talibanes anunciaran la muerte de su líder histórico, el mulá Omar, ocurrida en 2013.
«Se ha vuelto una costumbre. Cada vez que se habla de volver a la mesa de negociaciones, los talibanes lanzan grandes ofensivas», destacó en Kabul el experto militar Atiqulá Amarjil.
Queda por saber si «intentan hacer fracasar los esfuerzos tendientes a reactivar las negociaciones o buscan obtener concesiones importantes» antes de sentarse a negociar, dijo el experto.
La ofensiva contra el aeropuerto confirma la capacidad militar de los talibanes que prosiguen sus ataques contra objetivos gubernamentales y extranjeros a pesar de la llegada del duro invierno afgano, menos propicio a los ataques.
Los talibanes atacaron los edificios donde viven funcionarios y la base militar, indicó Khpalwak.
«Los combates comenzaron hacia las 18 horas del martes y se intensificaron durante la noche», relató Izatulá, un habitante del lugar.
«Los soldados reclamaban a los talibanes que dejaran partir a las mujeres y a los niños, pero se negaron. Se escuchaban los gritos y los llantos de los niños durante los combates», agregó.
En los últimos meses los talibanes llevaron a cabo varios ataques exitosos. A fines de septiembre tomaron el control durante algunos días de la capital provincial de Kunduz, su mayor victoria desde que fueron expulsados del poder por la invasión estadounidense en 2001.
Sin embargo, surgieron profundas divisiones entre los talibanes, lo que dificulta el reinicio de las negociaciones.
Varias fuentes indicaron que el jefe de los talibanes, Ajtar Mansur, cuyo nombramiento al frente del movimiento recibió críticas internas, había resultado herido e, incluso, muerto en un tiroteo que se produjo en una reunión de dirigentes la semana pasada en Pakistán.
Los talibanes difundieron el sábado un mensaje con la voz de Mansur, que desmentía de forma vehemente ese supuesto tiroteo.
Sin embargo, la grabación fue recibida con escepticismo por los especialistas.