AI: Sentencia contra Navalni es una cínica violación de los DDHH
EFE
Amnistía Internacional (AI) afirmó este martes que la condena de 9 años de prisión impuesta por un tribunal ruso al encarcelado líder opositor Alexéi Navalni por estafa es una cínica violación de los derechos humanos y está motivada políticamente.
La directora para Europa del este y Asia Central, Marie Struthers, señaló en un comunicado que «Navalni se enfrenta a nueve años de prisión por acusar a la élite rusa de corrupción y abuso de poder».
«El veredicto era predecible, pero eso no lo hace menos impactante. El mundo no debe ignorar este veredicto y sus implicaciones en el contexto de las horrendas violaciones de derechos humanos que estamos presenciando como resultado de la agresión rusa contra Ucrania», afirmó.
Recordó que el líder opositor ruso, nada más regresar de Alemania hace más de un año tras sobrevivir un intento de envenenamiento con el agente tóxico Novichok, fue encarcelado por un antiguo caso penal y sus organizaciones -como el Fondo de Lucha contra la Corrupción y su red de oficinas en Rusia- declaradas extremistas e ilegalizadas.
«En el contexto del flagrante desprecio de las leyes internacionales, europeas y nacionales por parte de las autoridades rusas, muchos más pueden enfrentar tal injusticia», dijo Struthers.
«Aplaudo el compromiso de Alexéi Navalni con la lucha contra la corrupción y otros abusos (…), señaló.
La responsable regional de AI afirmó que el líder opositor ruso «usó la sala del tribunal para hablar en contra de la agresión rusa en Ucrania, lo que probablemente podría llevar a cargos adicionales en su contra».
Navalni fue condenado hoy en la colonia correccional IK-2 en Pokrov, región de Vladímir, donde cumple dos años y medio de prisión, por «fraude a una escala especialmente grande» y «desacato al tribunal».
El político fue acusado de malversar aproximadamente 25.000 dólares de donaciones a organizaciones que él fundó.
AI analizó su caso y concluyó que la persecución «tuvo motivaciones políticas y se basó en la aplicación arbitraria de una ley que criminaliza indebidamente las actividades de Navalni».
