AI denuncia «crimen de guerra» y «apartheid» en la última escalada bélica en Gaza
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Cuando se cumple un mes de la tregua entre Israel y las milicias palestinas de Gaza, Amnistía Internacional (AI) denuncia «muerte indiscriminada de civiles» en la última escalada bélica de cinco días en la Franja y «destrucción generalizada» por parte de las tropas israelíes, lo que constituye un «crimen de guerra» y refleja «el coste en vidas humanas del apartheid».
“A principios de mayo, en su ofensiva contra la Franja de Gaza ocupada, Israel destruyó viviendas palestinas ilegalmente y sin que mediaran necesidades militares en lo que constituye una forma de castigo colectivo contra la población civil”, ha declarado Amnistía Internacional.
La organización también llamó la atención sobre los ataques aéreos «desproporcionados que causaron la muerte y heridas a la población civil, incluidos menores», en un informe publicado hoy.
AI ha investigado nueve ataques aéreos israelíes que provocaron la muerte de civiles y numerosos daños, como los tres bombardeos la primera madrugada de la ofensiva, el 9 de mayo, en los que se lanzaron bombas guiadas de precisión contra sendos altos mandos de las Brigadas Al Quds, brazo armado de la Yihad Islámica.
«Mataron a 10 civiles e hirieron al menos a otros 20. Las bombas fueron lanzadas contra zonas urbanas densamente pobladas a las 2 de la madrugada, cuando las familias dormían en sus casas, lo que indica que quienes planearon y autorizaron los ataques preveían —y probablemente descartaron— el daño desproporcionado a la población civil», afirmó la organización.
«El lanzamiento intencional de ataques desproporcionados que Amnistía Internacional ha documentado en operaciones israelíes anteriores, es un crimen de guerra», incidió.
AI recordó que las milicias de Gaza, encabezadas esta vez por las Brigada Al Quds, lanzaron «indiscriminadamente» cohetes, que provocaron la muerte de dos civiles en Israel y de tres civiles palestinos dentro del enclave, que «también deberían investigarse como crímenes de guerra».
Un total de 33 gazatíes murieron dentro de la Franja entre el 9 y el 13 de mayo, durante esa última escalada bélica -al menos 15 civiles incluyendo 7 niños- y 147 resultaron heridos, según el Ministerio de Sanidad del enclave.
Del lado israelí, hubo dos víctimas mortales: una anciana israelí murió por un cohete que impactó contra su edificio en Rehovot, y un gazatí con permiso de trabajo en Israel por impacto de metralla mientras pastoreaba cerca del enclave.
“Ha pasado un mes desde el alto el fuego, pero el sufrimiento que causan a la población civil de la Franja de Gaza estas recurrentes ofensivas israelíes no cesa nunca», lamentó la directora regional de AI para Oriente Medio y Norte de África, Heba Morayef.
Relatos de bombas destruyendo casas, padres sacando a sus hijos de los escombros, una adolescente muerta mientras dormía abrazada a su peluche figuran en la investigación de AI. Son «espantosas escenas que se repetirán a no ser que sus perpetradores respondan ante la justicia», aseveró Morayef.
“El hecho de que estemos documentando los mismos homicidios ilegítimos y la destrucción constante da fe de la inacción de la comunidad internacional a la hora de exigir cuentas a Israel. La impunidad de Israel por los crímenes de guerra que comete reiteradamente contra la población palestina y por sus 16 años de cruel bloqueo ilegal en curso de la Franja de Gaza alienta a que se cometan aún más violaciones y cronifica la injusticia», agregó la directora regional. EFE
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