¿Maduro o Guaidó? | Caso del oro venezolano vuelve a los tribunales británicos
EFE
Los abogados de Nicolás Maduro argumentaron este martes ante un tribunal británico que el Reino Unido lo reconoce «de facto» como líder de Venezuela -aunque haya apoyado al opositor Juan Guaidó-, lo que le daría el control sobre el oro depositado en el Banco de Inglaterra (BoE).
El letrado Nick Vineall planteó esta posición al defender ante el Tribunal de Apelaciones de Londres el recurso de la junta del Banco Central de Venezuela (BCV) designada por Maduro, encabezada por Calixto Ortega, contra un dictamen del 2 de julio, que daba al equipo «ad hoc» de Guaidó autoridad sobre las reservas.
Tras escuchar a las partes hasta el jueves, los jueces Kim Lewison, Stephen Males y Stephen Phillips decidirán, en una fecha por precisar, si su colega Nigel Teare, de la división Comercial y de Propiedad del Tribunal Superior, acertó cuando resolvió a favor de la junta del BCV nombrada por el opositor y presidida por Ricardo Villasmil.
Teare juzgó entonces que el Gobierno británico ha reconocido «inequívocamente» a Guaidó y es por tanto su junta -declarada ilegal en Venezuela y cuyos miembros viven en el extranjero- la que tiene potestad sobre los 31 lingotes de oro, por valor de 1.300 millones de dólares.
Al inicio de la sesión de hoy, Vineall sostuvo que, en una declaración diplomática el 4 de febrero de 2019, el ministerio de Exteriores británico solo reconoció a Guaidó «de jure» (en derecho), pero no «de facto» (de hecho), al frente de Venezuela, visto que en la práctica sigue tratando con Maduro y sus embajadores.
El abogado pide a la Corte que acepte esa distinción y conceda que es Maduro quien controla de hecho las instituciones venezolanas y por tanto quien debe acceder al oro custodiado en Londres, ya que negárselo sería «surrealista».
En la declaración institucional que centra esta disputa, el entonces ministro de Exteriores, Jeremy Hunt, afirmaba que el Reino Unido reconocía a Guaidó «hasta que puedan celebrarse elecciones creíbles».
Según Vineall, este reconocimiento «de jure» es solo «una opinión sobre la legalidad, al amparo de una Constitución extranjera, de la posición reivindicada», pero no implica que se reconozca al líder opositor como gobernante del país latinoamericano.
De hecho, en su opinión, si el Ejecutivo de Londres lo viera como tal, pese a la evidencia del control de Maduro, estaría violando «sus prerrogativas» en base a la legislación internacional, que impiden «intervenir de forma coercitiva» en los asuntos internos de otro Estado.
La Justicia británica debe establecer qué junta del BCV es la legítima a fin de avanzar en la demanda presentada en mayo contra el BoE por Ortega, que acusa al banco central británico de infringir el contrato al no cumplir su orden de transferir 930 millones de euros de las reservas a un fondo de la ONU para que sean usados en la lucha contra la COVID-19 en el país sudamericano.
El fallo servirá también para resolver un pleito planteado por Deutsche Bank en 2019, sobre cuál de los dos bandos puede reclamar 120 millones de dólares derivados de la terminación de un contrato de permuta de oro.