A prisión el tatuador venezolano que abusa de niñas en España
Agencias
El juez ha decretado hoy el ingreso en prisión provisional del dueño del establecimiento de tatuajes de Donostia-San Sebastián acusado de acoso y abusos sexuales, sobre el que pesan 15 denuncias hasta el momento, han informado fuentes municipales.
Este tatuador, arrestado el pasado día 5, pasó el miércoles a disposición judicial y, tras prestar declaración, el juez decidió prolongar su detención para continuar este jueves con las diligencias del caso.
Tras declarar de nuevo esta mañana, el magistrado instructor ha ordenado la prisión provisional para el detenido.
Investigación
La alarma saltó el viernes pasado cuando por el mensaje que hizo una de sus clientes en redes sociales. “Acabo de llegar a casa llorando porque he sido acosada sexualmente por mi tatuador”, comentaba.
Fuentes municipales han recordado que, desde la pasada semana, la Guardia Municipal se encuentra recabando información relativa a los hechos. En los últimos días ha escuchado los testimonios de personas, mujeres en su mayoría, que hasta el momento se han traducido en nueve denuncias.
Tras constatar que el contenido de alguna de esas denuncias puede constituir infracción penal, la Guardia Municipal donostiarra ha procedido a la detención de este individuo, que en las próximas horas pasará a disposición judicial.
El caso de este tatuador de conoció a través de las redes sociales. Una mujer publicó en su cuenta de Facebook que «había sido acosada sexualmente por su tatuador», lo que llevó a la Guardia Municipal donostiarra a abrir una investigación y solicitar colaboración ciudadana.
Según el relato de la clienta del establecimiento donostiarra, el tatuador hizo «comentarios sexuales desde el minuto uno», le «agarró del culo», «de la cadera desnuda» y le hizo «desabrocharse el botón del pantalón» cuando lo que había solicitado era un pequeño tatuaje en el brazo.
La denunciante aseguró que, «al ver esa actitud», no hizo «más que temblar» y permaneció callada mientras el tatuador trabajaba porque «estaba aterroriza». «Aunque me quería ir estaba en shock total», afirmó. Asimismo pide a las mujeres que no vayan a ese establecimiento para que «no tengan que pasar por lo mismo» y afirma que «tiene en la piel» un tatuaje que le «recordará siempre cómo ha sido tratada».
El establecimiento objeto de las denuncias ha sido atacado con pintadas en las que califican al tatuador de «acosador» y «cerdo».
Personas ligadas al mundo de los tatuadores y los tatuajes dijeron ayer a PANORAMA que “Estrada fue despedido de un local en el que trabajó en un mall de la avenida La Limpia, porque no pagaba a tiempo sus cánones de arrendamiento”.
Agregaron quienes le conocieron durante su tiempo en ese local que, aunque nadie formalizó denuncias, “era común escuchar que se había propasado con alguna mujer o había dicho un comentario fuera de lugar a alguna otra”, informaron.