7 inventos locos, aunque algunos son curiosamente brillantes
Con información de BBC Mundo
Por cada invento que tiene éxito hay miles atrás que fracasan.
Ideas que a veces son geniales, pero que no encuentran su público.
Aunque también hay creaciones tan ridículas que francamente dan risa.
En BBC Mundo celebramos la creatividad mostrándote siete de los inventos más locos que se crearon, tanto en el pasado como en épocas más recientes.
El Impulsoria (1850)
Esta original locomotora llegó a probarse con éxito en Londres en 1850 y fue exhibida al año siguiente en la primera Gran Exhibición mundial en esa ciudad inglesa.
La creó el diseñador italiano Clemente Masserano como una versión más barata que la tradicional locomotora a vapor.
Los caballos caminaban sobre una cinta, lo que generaba la energía.
Sin embargo el Impulsoria nunca llegó a competir contra las locomotoras tradicionales, quizás porque era bastante más lenta.
La trampapistola mata ratones (1882)
En 1882 a James A. Williams de Texas, EE.UU., se le ocurrió una novedosa forma de matar ratones.
Como buen texano, propuso usar un revolver calibre 50. Para ello creó y patentó esta trampa que, en vez de atrapar al roedor, le vuela los sesos.
Sin embargo no hubo mucha gente dispuesta a colocar armas cargadas por toda su casa y el invento fracasó.
El creador de hoyuelos (1936)
¿A quien no le gustan las sonrisas con hoyuelos?
En 1936 la estadounidense Isabella Gilbert inventó este aparato que prometía crearlos.
«Úsalo de a cinco minutos, dos a tres veces por día», decían las instrucciones.
Sin embargo a la Asociación Médica de Estados Unidos no le pareció muy simpático el invento.
En 1947 lo denunció, asegurando que no solo no creaba hoyuelos sino que su uso prolongado podía llegar a generar cáncer.
Masajeador eléctrico para el cuero cabelludo (1940)
Como muestra este aviso, el masajeador consistía de un casco con cuatro discos que vibraban sobre la cabeza.
«480 dedos artificiales le dan al cuero cabelludo un masaje suave y beneficioso«, decía la publicidad.
El aparato prometía estimular la circulación de sangre no solo en el cuero cabelludo sino también en las células cerebrales y prometía remover la caspa.
Aunque no tuvo éxito, eso no impidió que con el paso de los años muchos otros lanzaran propuestas similares, que incluso hoy en día -aunque con versiones más modernas- siguen existiendo.
La almohada abrazadora (2009)
Ideal para cuando extrañas a tu pareja, el Hug Me Pillow (almohada abrázame) se promocionó como el perfecto compañero para acurrucarse.
«Se puede usar como almohada de cuerpo o para el cuello», decía también el fabricante.
Sin embargo, muchos encontraron este brazo con medio cuerpo tenebroso, más que amoroso.
El bebé trapeador (2012)
Empezó con un chiste, primero en un falso aviso japonés y luego en otra publicidad inventada por el programa cómico estadounidense Saturday Night Live.
Sin embargo, una empresa vio una oportunidad para hacer dinero y lanzó un verdadero Baby Mop (o enterito de bebé que sirve como trapeador).
El Baby Mop cuesta cerca de US$40 y se vende en Amazon y en el sitio de camisetas graciosas BetterThanPants.com.
Un directivo de esta última empresa reconoció que las ventas son pocas, bromeando con el sitio de la revista TIME que alcanzan «los doble dígitos».
El Fliz (2012)
La bicicleta sin pedales fue diseñada por los alemanes Tom Hambrock y Juri Spetter y está basada en la primera bicicleta que existió: la Laufrad.
Su nombre viene de la palabra alemana «flitzen», que significa corrida.
El ciclista cuelga de un arnés entre ambas ruedas y corre para tomar velocidad.
El concepto fue celebrado por los ecologistas pero tuvo pocos adeptos.