153 recién nacidos han muerto en 2016 en el Hospital Central de San Cristóbal
Con información de El Nacional
Médicos residentes del Hospital Central de San Cristóbal afirmaron que en el principal centro asistencial del Táchira -donde también reciben pacientes de Mérida, Barinas, Apure e incluso Cúcuta (Colombia)- murieron 153 neonatos de más de 1.000 que atendieron este año en las áreas de retén y recién nacidos hasta el 31 de mayo.
«Se han atendido 1.070 recién nacidos de los cuales tenemos 153 fallecidos. Es algo alarmante, que suena solo como un número, pero imagínense 153 familias de luto por esas muertes. Es algo que nos tiene que llamar a la conciencia», dijo Orlymar Torres, médico residente del también principal centro de salud del suroccidente del país.
Explicó que los fallecimientos se deben a nacimientos antes de tiempo por falta de control prenatal. Muchos otros requieren de surfactante pulmonar, con el que no se cuenta frecuentemente para atender todos los casos.
«Tenemos todos los niños juntos, tenemos casos de dengue con pacientes con neumonía. Tenemos gran cantidad de pacientes en esas condiciones», dijo Torres, quien indicó que a falta de espacio los bebés comparten cama o cuna a riesgo de que alguno pueda contagiar a otro.
Las condiciones para trabajar son difíciles en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrico. Los médicos relataron que no cuentan con oxihood o equipo de oxigenoterapia para recién nacidos y han tenido que improvisar con sobres de manila para elaborar oxigenadores a fin de garantizar la terapia respiratoria de los bebés. Tampoco tienen antibióticos suficientes y con los pocos que hay los mezclan para cubrir la necesidad de los pequeños.
También carecen de equipos de monitoreo de tensión; solo funciona un laringoscopio en todo el retén. Los equipos de gases arteriales no funcionan desde hace 15 meses, no hay área de aislamiento y los flujómetros y humidificadores son insuficientes.
De una lista de 36 implementos como inyectadoras, yelcos, catéteres, sedas, tapabocas, solicitados el 27 de mayo de 2016, la dirección del hospital solo les suministró 5.
Los niños que son pacientes oncológicos llevan meses sin tratamiento y les recomiendan a los padres buscar las medicinas en otra parte. Incluso, se han atrevido a buscar algunos antineoplásicos que en Cúcuta el precio supera los 11 millones de pesos, es decir, alrededor de 3,5 millones de bolívares por cada ampolla.