Producción de crudo venezolano sigue cayendo y baja a 1,6 millones barriles

La empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) aporta al Estado venezolano más del 90 % de las divisas que entran al país, y atraviesa una grave crisis de producción y financiera que el presidente Nicolás Maduro trató de atajar nombrando en noviembre a un militar al frente de la compañía.

Sin experiencia en el sector, el mayor general Manuel Quevedo tomó las riendas del gigante venezolano y prometió mano dura contra la corrupción, que según Maduro está detrás de los problemas financieros y de producción de la compañía.

Más de 60 personas han sido detenidas desde agosto por supuestos casos de corrupción en la industria petrolera venezolana. Entre quienes están presos hay dos expresidentes de la compañía, Eulogio del Pino y Nelson Martínez, cercanos a Rafael Ramírez, quien fuera presidente de Pdvsa más de una década bajo el mandato de Hugo Chávez.

Conocido en su día como «zar del petróleo», Ramírez fue obligado a renunciar a finales de 2017 de su cargo como representante de Venezuela ante la ONU, y no ha regresado desde entonces a su país, donde se ha abierto una investigación contra él por corrupción que el también exministro considera una persecución política.

Desde octubre del año pasado, Pdvsa ha sido declarada en «default» por varios agentes financieros internacionales, después de que la compañía estatal no cumpliera a tiempo con los pagos de vencimientos de algunos de sus bonos de deuda externa.

Durante su presidencia (1999-2013), Chávez se endeudó masivamente con el objetivo de aumentar la producción -que estaba en más de 3 millones de barriles diarios cuando llegó al poder en 1999- hasta los 6 millones de barriles diarios.

Pese a que el mayor general Quevedo se ha fijado como meta aumentar la producción en más de un millón, la producción cayó un mes más en diciembre, y los expertos no ven perspectivas cercanas de recuperación. EFE