La Agencia Espacial Europea pierde la esperanza de volver a contactar con Philae - 800Noticias
800Noticias
Tecnología

Fuente: gizmodo.com

Philae hizo historia el 12 de noviembre de 2014 con un aterrizaje sin precedentes sobre el cometa 67P. Pero además de histórico, fue muy accidentado: la sonda dio varios giros, no desplegó sus arpones de anclaje y rebotó a lo largo de 1 km. Aquel aterrizaje de 7 horas determinó su destino.

La misteriosa Señal Wow! de radio captada en 1977 podría tener su origen en cometas

El 15 de agosto de 1977, el radiotelescopio Big Ear de Ohio registró la señal de radio más potente…
Seguir leyendo

No es que el módulo de aterrizaje de Rosetta no cumpliera con su cometido: realizó el 80% de los experimentos científicos que tenía programados y envió un torrente de datos antes de que se agotaran sus baterías. Pero, a pesar de que los ingenieros de la ESA reorientaran sus paneles solares para que pudieran recibir energía en inesperada ubicación, Philae acabó entrando en hibernación durante meses.

El cometa se empezó a calentarse en marzo, por el acercamiento al Sol. Philae logró despertar el 26 de abril, pero no consiguió contactar con Rosetta hasta junio. Después del 13 de junio, las transmisiones empezaron a ser intermitentes. El último contacto de Philae con su nave nodriza ocurrió el 9 de julio de 2015. Los científicos de la misión Rosetta han perdido la esperanza de volver a saber de ella.

“Lamentablemente, se están agotando las posibilidades de que Philae se ponga en contacto con su centro de control”, explica Stephan Ulamec, responsable del proyecto Philae en el Centro Aeroespacial Alemán. “Ya no le enviamos nuevos comandos, y sería muy sorprendente si volviésemos a recibir su señal”.

El cometa 67P entró en su periodo de máxima actividad en los meses anteriores y posteriores a su perihelio, en agosto de 2015. Los científicos de la ESA creen que el incremento de los niveles de gas en la superficie del cometa ha podido cubrir de polvo los paneles solares de la pequeña sonda. Esperaron hasta el 10 de enero para enviar a Philae la orden de “sacudirse el polvo”, pero no hubo respuesta.

En los próximos meses, a medida que bajan las temperaturas y el cometa reduce su actividad, la nave Rosetta podrá volver volar a sólo 10 kilómetros de altitud y hacer fotos de Philae. Entonces sabremos dónde ha ido a parar exactamente, si se ha movido desde entonces y cuál es su estado actual. En septiembre, la misión Rosetta finalizará con la sonda grande estrellándose sobre la superficie el cometa.

67P/Churyumov–Gerasimenko ha pasado la órbita de Marte y está ya a 350 millones de kilómetros del Sol. Las temperaturas empezarán a caer por debajo de lo que Philae puede soportar. El pequeño módulo de aterrizaje de Rosetta se enfrenta a la eterna hibernación.

Síguenos por @800noticias