Crean robot que puede diseñar y perfeccionar otros autómatas
Como ha ocurrido en otras ocasiones, la robótica se inspira en la naturaleza para avanzar en su desarrollo. En esta ocasión, un grupo de investigadores de la Universidad de Cambridge observó que la evolución de las especies y la selección natural ante las diversas prueba, errores y aciertos era una modalidad que podían aplicar a un proyecto de un robot que puede crear sus propios robots.
El proyecto consiste en un robot madre que puede construir de forma independiente sus propios «hijos», como denominaron los investigadores a las creaciones del equipo principal. De esta forma, las sucesivas generaciones de las réplicas del pequeño prototipo contará con las mejoras que detectó de forma independiente, sin intervención humana o simulación informática.
Los ingredientes para que el robot madre pudiera fabricar a sus «hijos» consistían en unos pequeños cubos y un pequeño motor.
De forma incipiente, los investigadores descubrieron que el equipo principal, basado en un brazo robótico, había logrado desarrollar un tipo de inteligencia artificial primitiva que le permitía analizar y preservar el prototipo o réplica que había logrado recorrer la mayor distancia. Nada que pueda suponer que, en el corto plazo, tengamos el mentado futuro de Skynet amenazando a la humanidad.
«La evolución se basa en la reproducción y análisis de las capacidades que tiene una especie. Eso es lo que hace este robot», señaló el doctor Fumiya Iida, del departamento de Ingeniería de la Universidad de Cambridge.
«Nosotros solemos imaginar a los robots trabajando en tareas repetitivas, y de hecho suelen estar creadas para la producción en masa. Pero lo que nosotros buscamos es que los robots sean capaces de ser innovadores y creativos», agregó Iida, citado en el comunicado de la Universidad de Cambridge.
Este tipo de disciplina, conocida como robótica evolutiva, suele desarrollarse mediante simulaciones por computadora. Si bien el poder del cálculo le permite estimar cientos de miles de variables y posibilidades, suele producirse una brecha entre los resultados obtenidos mediante este tipo de simulaciones y el trabajo en la vida real.
Y sobre este punto es que Iida trabaja con el equipo madre y la incipiente tarea de evaluación y evolución de sus creaciones sin intervención humana, aunque el investigador señala que los robots son menos eficientes en el consumo de enrgía que los humanos para llevar a cabo estas tareas.
Fuente:La Nación Argentina
