Carlos Melo: Yo quisiera creer en el gobierno

Redacción 800 Noticias

Carlos Melo, dirigente del partido Avanzada Progresista, quien fue liberado este lunes en horas de la noche por el gobierno del Presidente Nicolás Maduro, expresó  “se están discutiendo cerca de 150 nombres” para una posible liberación.

Melo, fue entrevistado por la periodista Patricia  Janiot, y manifestó que “no tengo nombres pero tengo entendido que sí se están discutiendo cerca de 150 nombres y se están sacando caso por caso”.

“Fui detenido por 8 semanas en lo que se denomina, inclusive a nivel internacional, como una detención arbitraria. En la primera semana de mi detención ya el equipo de abogados había desmontado los argumentos que existían en mi contra: conspiración, tenencia de sustancias explosivas y resistencia al arresto”, expreso el dirigente de partido Avanzada Progresista.

“La juez había ordenado una libertad bajo fianza, eso nunca se cumplió como en otros muchos casos que hay actualmente. En Venezuela hay cerca de 2.500 venezolanos con medidas sustitutivas, es decir que están en juicio por razones políticos. Y hay en las cárceles cerca de 150 presos políticos por diferentes casos”, dijo el dirigente opositor.

Indicó que, a pesar de ya estar fuera de la cárcel, “tengo una prohibición de salida del país y tengo que presentarme cada 8 días, pero tuvimos unas conversaciones en el tribunal y eso debe ser modificado, pero la mesa de derechos humanos está discutiendo el tema de las libertades, que tuvo influencia por supuesto en mi salida”.

“En las últimas dos semanas han salido 9 detenidos, no solamente los 4 de anoche, antes de eso estuvo Francisco Márquez, Hurtado Santainés, Alejandro Puglia. (…) Yo quisiera creer que el Gobierno comprendió que el camino de la reflexión es incorrecto, no puede ser que todo aquel que opine diferente vaya a parar en una cárcel, eso es absurdo”, enfatizó.

Carlos Melo denunció que “en las cárceles del Sebin hay más de 25 personas con libertades otorgadas por los tribunales y no los han puesto en la calle, eso es privación ilegítima de la libertad”.

“Uno pasa a ser una especie de sospechoso habitual cada vez que hay un deseo de reprimir intentando intimidar a los venezolanos que ya no se intimidan”, expresó.