Se cumplen 65 años de Luna 1
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El 2 de enero de 1959, la Unión Soviética lanzó Luna 1 desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán. La sonda, que pesaba 361 kilogramos, estaba equipada con todo tipo de instrumentos científicos para estudiar el espacio, como un magnetómetro, un contador Geiger y un detector de micro meteoritos.
Luna 1 alcanzó la velocidad de salida de la Tierra en solo 47 minutos, convirtiéndose en el primer objeto humano en hacerlo. También fue la primera nave espacial en salir de la gravedad terrestre y llegar más allá de la Luna, pasando a 5.995 kilómetros de su superficie el 4 de enero.
El plan original era que se estrellara contra la Luna, pero un fallo en el sistema de control del cohete que la lanzó provocó que la sonda se desviara de su trayectoria. En su lugar, Luna 1 entró en una órbita alrededor del Sol, entre las órbitas de Marte y la Tierra, de ahí que se le denomine como el primer satélite artificial en orbitar alrededor de esta estrella.
El «éxito» de Luna 1 fue un hito importante para la URSS, que se convirtió en la primera potencia en alcanzar el espacio exterior, y como es de esperar en aquella época tan competitiva, con una posible Tercera Guerra Mundial en juego, fue un golpe para Estados Unidos, que hasta entonces parecía que estaba ganando la carrera espacial.
Ahora se cumplen 65 años, pero ¿qué significó la Luna 1 para la carrera espacial?
Aparte de lo comentado anteriormente con respecto a la URSS y Estados Unidos, dio pie al comienzo de una nueva era en la exploración espacial. La sonda demostró que era posible que los humanos llegaran al espacio exterior y ayudó a sentar las bases para futuras misiones espaciales, como el aterrizaje del Apolo 11 en la Luna en 1969, que seguramente recuerdes más.
Además, fue un hito tecnológico, ya que la sonda fue construida en solo 18 meses y estaba equipada con la última tecnología disponible en ese momento. Tiene una forma esférica con un diámetro de 58 centímetros y está equipada con una antena parabólica de 2,4 metros de diámetro para comunicarse con la Tierra.
En los años siguientes, Luna 1 continuó orbitando el Sol. En 1960, la sonda se acercó a la Tierra a una distancia de solo 120.000 kilómetros y en 1972, a Venus a una distancia de solo 80.000 kilómetros. Hoy en día, sigue orbitando el Sol, aunque ya carece de función alguna, y se espera que la sonda continúe en órbita durante muchísimos años —y eso que tenía una vida útil prevista de tres meses—.
Con información de ComputerHoy
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