¿Quien fue San Benito?, por María García de Fleury
por: María García de Fleury
El 11 de Julio es el día de San Benito, el santo patrono de Europa y fundador de la orden benedictina; vivió un tiempo de grave crisis de valores y de instituciones, nació en Italia, en Nurcia, en el año 480. En ese tiempo, la iglesia estaba agrietada por los sigmas, ciudades y países estaban de colados por la guerra; el pillaje, el alejamiento de Dios y el desorden personal y social era lo que se veía tanto entre cristianos como entre gentiles.
Los gobernantes y los legisladores eran casi todos ateos, paganos o herejes, en ese tiempo los bárbaros invadieron Europa y la única institución que fue respetada por los bárbaros fue la iglesia católica, porque mientras los gobernantes huían, los sacerdotes católicos y los obispos permanecían como verdaderos pastores.
Benito provenía de una familia muy rica y como joven fue enviado a estudiar en Roma, encontró que en la escuela y los colegios los jóvenes imitaban los vicios de los mayores. Asqueado por la vida libertina de sus compañeros y temiendo llegar a contaminarse con su ejemplo, decidió abandonar Roma.
Se alejó y se fue un lugar llamado Subiaco, allí encontró un monje llamado Romano quién lo llevó a una gruta, le de dio un hábito de monje y le llevaba pan para que se alimentará. Durante 3 años Benito a través de la penitencia, el silencio y la oración estableció una relación muy estrecha con Dios, el demonio tentador entonces fue a provocarlo pero Benito no sucumbió. Por su fama de santidad lo llamaron para que fuera Abad de un monasterio pero apenas tenía 23 años y él les dijo que era demasiado joven y qué como se había un puesto un régimen de vida extremadamente estricto, los monjes se iban a arrepentir de haberlo nombrado.
Y así fue, un monje quiso envenenarlo y en el momento en que Benito hizo la bendición, la copa se partió en muchos pedazos, él se retiró entonces de ese convento y se fue de nuevo a Subiaco donde fundó 11 monasterios. El monasterio número 12 lo fundó su hermana gemela llamada escolástica, como convento de mujeres.
En ese tiempo, otro monje envidioso, quiso envenenarlo con pan y tampoco lo logró; de allí Benito se fue a Montecasino donde fundó un monasterio que fue el origen de los monasterios en Occidente. Escribió unas reglas para la vida monástica que se propagó de tal modo por todas partes que por ella lo han llamado El patriarca de los monjes de occidente. De ese monasterio han salido más de 200 cardenales, 30 papas, más de 6.000 sacerdotes.
El gran amor de Benito y su gran fuerza estuvo en la Santa Cruz, con la que hizo muchos milagros porque fue un poderoso exorcista; ese don para someter a los espíritus malignos, lo ejerció utilizando como sacramental la famosa cruz de San Benito. San Benito siempre luchó contra el tentador y es por eso que se le recomienda a sus discípulos usarlo para ahuyentar el demonio y hacer el bien.
El 21 de marzo del año 547 murió San Benito rodeados de sus discípulos, quiénes aseguraron que cuando murió un rayo de luz subió hasta el cielo. San Benito había entregado a Dios toda su vida, consciente de que con Dios ¡siempre ganamos!