Isabel II valora las fuentes periodísticas «fiables» ante la pandemia
EFE
La reina Isabel II, jefa del Estado británico, destacó este lunes la labor de los medios de comunicación durante la pandemia de la COVID-19 al considerar «vital» contar con fuentes de información «fiables» ante la crisis.
La reina, de 94 años, hizo esta observación en un mensaje de apoyo a la campaña de la Asociación de Noticias y Medios (News Media Association, NMA) sobre la importancia del buen periodismo.
En su nota, Isabel II rindió tributo a los «valiosos» esfuerzos de los periódicos locales, regionales y nacionales para apoyar a las comunidades británicas durante la pandemia.
«La pandemia de la COVID-19 ha demostrado una vez mas cuán importante es el servicio público que facilitan los medios de información ya establecidos, tanto nacionales como regionales. Mientras nuestro mundo ha cambiado radicalmente, tener fuentes de información de confianza y fiables, sobre todo cuando hay muchas fuentes que compiten por nuestra atención, es vital», añadió la soberana.
«Los esfuerzos de los medios de información -dijo- para respaldar a las comunidades en todo el Reino Unido durante la pandemia han sido valiosos, ya sea a través de recaudaciones, animando el voluntariado, o dando esperanza a los ancianos y los vulnerables».
El presidente de la NMA, Henry Faure Walker, ha escrito un artículo abierto, que aparece en distintos medios, para pedir al Gobierno apoyo para «sostener el periodismo independiente local», dada la caída de ingresos a causa de la crisis sanitaria.
Walker resaltó que los periódicos han respaldado campañas para recaudar fondos destinados al personal sanitario y trabajadores que hacían labores cruciales durante el confinamiento, dispuesto el pasado marzo hasta que en junio empezó a suavizarse.
«Los ingresos por publicidad, centrales para un periodismo independiente, han resultado castigados por la desaceleración económica, dejándonos con menos dinero para invertir en el periodismo que todos queremos leer», agregó Walker.
El pasado abril, el ministro británico de Cultura, Oliver Dowden, animó a la población a comprar un periódico para apuntalar a los medios en medio de una crisis existencial por la caída de ingresos y un descenso de la circulación.