Graduaciones!!!, por María García de Fleury
María García de Fleury
Las graduaciones se producen en diversas etapas de la vida y sin duda vale la pena celebrarlas. Ya sea desde el preescolar, la escuela primaria, la secundaria o la universidad, son momentos que indican el final de algo y el comienzo de otra cosa.
En el mes de julio hay niños y jóvenes graduándose de acuerdo a sus edades. Cada graduación significa algo diferente para las familias y para cada uno de los graduandos.
Graduarse de preescolar es constatar con felicidad que ya se empezó a aprender y a socializar y se está listo para continuar aprendiendo de manera formal.
Graduarse de primaria significa algo diferente. Es darse cuenta que se está empezando a crecer de verdad con las habilidades esenciales que se han aprendido.
La ceremonia de graduación de bachiller es diferente a las demás. Es la única vez que te vas a graduar de los primeros estudios.
Luego, en la universidad podrás tener muchas graduaciones pero la de bachiller es única, es trascendental. Sin duda es un hito importante en la educación de un estudiante porque es una experiencia que empodera, que cambia la vida. Los beneficios de ser bachiller tienen impacto en cada persona para toda la vida.
Cuando recuerdes tu experiencia en la escuela secundaria tendrás la satisfacción de saber que superaste y lograste algo importante.
Contando un año de preescolar más 12 años de escolarización, equivalen aproximadamente a 2.200 días. Eso es mucha escuela. Cuando un estudiante recibe su diploma de bachiller, todos debemos celebrar.
Graduarse de bachiller significa el comienzo de la edad adulta. Es el comienzo de encontrar una carrera donde puedas desarrollarte como persona y contribuir a trabajar por una sociedad y un mundo mejor. Es asumir responsabilidades de adulto, aunque sea joven.
Con cada una de estas graduaciones, uno se siente feliz y emocionado, porque es ver crecer y aprender a nuestros niños y jóvenes. Es admirar sus obras de arte, sus increíbles proyectos de clase. Es escucharlos en los conciertos escolares. Es animarlos en eventos deportivos. Es celebrar sus hitos educativos.
Los graduando han logrado una meta en la vida, que esperamos y deseamos lleven a otras nuevas metas en el desarrollo de sus vidas. En la carrera de bachiller, los estudiantes tienen la oportunidad de desarrollar sus propias habilidades, la graduación de bachiller, los padres, madres y representantes, recordamos y sabemos cuánto esfuerzo se ha puesto en cada uno de esos 2.200 días de escuela.
Algunos de esos días se prolongaban hasta altas horas de la noche, terminando proyectos, tareas. Algunos de esos días involucraron múltiples viajes de ida y vuelta a la escuela para citas con el médico, citas con el dentista, citas con la ortodoncia. Incluye también varias horas de reuniones con maestros, directores y consejeros. Todo para asegurar que los niños y jóvenes pudieran recibir la mejor educación posible.
La graduación significa mucho agradecimiento. Agradecimiento a cada uno de los papás y mamás, a las maestras, profesores, directivos, personal administrativo y obreros de las escuelas, a quienes hay que alabar y agradecer por su labor diaria, tan especial, para cada uno de los estudiantes.
En las graduaciones que vivamos, sobre todo, agradezcamosle a Dios que le ha dado a cada uno de estos niños y jóvenes la salud, la inteligencia y la perseverancia que le han permitido lograr esta meta en su vida.
Demos gracias a Dios porque sabemos que con Dios siempre ganamos.
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