¿Comer chicle es malo?

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Es habitual que las personas se pregunten si es malo comer chicle o, por el contrario, se trata de una práctica beneficiosa. La confusión surge porque- aunque a menudo se percibe como una forma inofensiva de refrescar el aliento y estimular la producción de saliva- sus componentes y el consumo frecuente podrían causar ciertos problemas que vale la pena conocer.

Las gomas de mascar existen desde la antigüedad y la práctica de masticarlas, sin tragarlas, ha perdurado a lo largo de los siglos. El chicle moderno, compuesto por una base de caucho sintético, edulcorantes y saborizantes, se considera seguro para el consumo humano.

Sin embargo, algunos de sus ingredientes pueden tener efectos inesperados y masticar, de manera constante, puede ocasionar molestias o problemas en la salud bucodental. Descubre todo lo que debes saber sobre este producto antes de mascar tu próximo chicle.

Masticar chicles todos los días y con mucha frecuencia puede afectar la mandíbula o provocar dolores de cabeza. Sin embargo, su uso ocasional o de manera consciente puede tener algunos beneficios para la salud.

1. Reducción de las caries

Masticar chicles sin azúcar estimula la producción de saliva, lo que ayuda a limpiar los dientes de manera natural y a reducir el riesgo de caries. Este fluido en la boca elimina los restos de comida y neutraliza los ácidos producidos por las bacterias, que pueden desmineralizar las piezas dentales.

Además, los edulcorantes artificiales presentes en los chicles sin azúcar, como el xilitol y el sorbitol, no son fermentados por las bacterias orales. Esto significa que no contribuyen a la formación de caries. De hecho, algunos estudios sugieren que el xilitol puede inhibir el crecimiento de los gérmenes responsables de la caries dental y la gingivitis.

Masticar chicle sin azúcar puede ser una alternativa útil para limpiar la boca cuando no se tiene acceso al cepillo dental. Sin embargo, es importante recordar que no debe reemplazar el cepillado y el uso del hilo dental.

Los chicles con azúcar

El efecto anticaries solo aplica a las gomas de mascar sin azúcar. Los chicles endulzados con azúcar tienen el efecto contrario y pueden aumentar el riesgo de caries.

Cuando ingerimos azúcar, las bacterias de la boca la descomponen y producen ácidos que dañan el esmalte de los dientes y crean un ambiente propicio para el desarrollo de caries. El uso regular de este tipo de dulces favorece la acumulación de placa y, con el tiempo, provocar deterioro dental.

2. Alivia la sequedad bucal

Masticar chicle puede ser de utilidad para aliviar la sequedad bucal o xerostomía, una situación que ocurre cuando la boca no produce suficiente saliva. Esta falta de humedad puede provocar mal aliento y, con el tiempo, aumentar el riesgo de caries.

Como ya mencionamos, masticar chicle estimula la producción de saliva. Sin embargo, hacerlo con frecuencia no es la mejor manera de tratar la sequedad bucal. Encontrar la causa de la afección, beber suficiente agua y, en casos severos tomar medicamentos para tratar la condición, son métodos más eficaces y saludables a largo plazo.

3. Mejora el mal aliento

Masticar chicles puede ser una forma efectiva de reducir el mal aliento, sobre todo si contienen ingredientes específicos que combaten los compuestos responsables del mal olor. Las gomas de mascar con probióticos como lactobacillus, acetato de zinc, extracto de corteza de magnolia o de eucalipto, por ejemplo, han demostrado ser útiles en el tratamiento de la halitosis.

Estos ingredientes pueden ayudar a neutralizar las bacterias que producen compuestos sulfurados, considerados como la principal causa del mal aliento. Además, la masticación estimula la producción de saliva y favorece la limpieza natural de la boca.

La goma de mascar puede ser una medida efectiva para refrescar la boca después de consumir alimentos con olor fuerte. Sin embargo, se trata de una estrategia temporal y no reemplaza una buena higiene oral.

4. Reduce el estrés

Masticar chicle se ha asociado con mejoras en la función cerebral, incluyendo un aumento en el estado de alerta, la memoria, la comprensión y la toma de decisiones. Los estudios sugieren que esta práctica puede ayudar a reducir los niveles de depresión, ansiedad y estrés, proporcionando un alivio inmediato en momentos de alta demanda mental.

Aunque los beneficios del chicle parecen ser temporales y se mantienen mientras se mastica, puede ser útil en situaciones que requieren concentración o una rápida relajación. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta práctica no debe considerarse una solución a largo plazo para el manejo del estrés.

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