Clubhouse | La nueva red social de la que todos hablan

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Con la llegada del covid-19, el podcast se posicionó como uno de los nuevos formatos más populares para transmitir contenido y eso es algo que Paul Davidson y Rohan Seth tuvieron en cuenta al crear Clubhouse.

La app, que funciona como una red social en la que los usuarios publican exclusivamente audios, se convirtió a finales de 2020 en una de las aplicaciones mejor posicionadas. Pero, de qué va la nueva plataforma de la que todos hablan.

¿Qué es Clubhouse?

Clubhouse es la nueva aplicación basada únicamente en audio, en voz para que los podcasters puedan subir sus contenidos a la red y compartirlo con sus seguidores. La red social de audio es exclusiva por los momentos: en ella participan unos miles de privilegiados influyentes, relacionados con Silicon Valley y algunas estrellas de Hollywood.

A la red solo se puede acceder por invitación, como una especie de club, de allí su nombre. Los podcast se suben en unas salas virtuales, rooms, como se llaman los espacios de reunión, similares a los canales de Twitch. Los usuarios pueden tener conversaciones del momento.

¿Cómo funciona la app?

Una vez que el usuario ingresó, observará la opción de “salas” en la que todos los demás miembros mantienen conversaciones, todas abiertas, de las que se puede entrar o salir a gusto del usuario. A la conversación se puede ingresar como un miembro de la audiencia y si desea hablar se le da a la opción de levantar la mano y los oradores pueden optar por invitarlo.

También se puede crear una habitación propia, lugar para reunirse con amigos y con gente nueva de todo el mundo, para contar historias, hacer preguntas, debatir, aprender y tener conversaciones.

¿Quiénes son los genios detrás de la app?

Paul Davisonm, exingeniero de Google y Rohan Seth, empresario de Silicon Valley que ya en 2021 creó Highlight, una aplicación que permitía compartir ubicaciones entre personas.

¿Cómo nació el proyecto?

La aplicación se creó  en 2020, un año marcado por la pandemia y por la emergencia del audio, de la voz, como herramienta y vehículo de la nueva era digital. Marc Andreessen, conocido inversionista de Silicon Valley, fue uno de los fundadores de esta red que nace como espacio virtual y sonoro, informó el medio El País. Entre los inversores está  Andreessen Horowitz.

¿Qué privilegios tiene?

Sin la cámara encendida, la persona que está hablando no tiene que preocuparse por el contacto visual, lo que está usando o dónde se encuentra. Tampoco se necesita  escribir algo para mantener una conversación con los demás. La entonación, la inflexión y la emoción que se transmite a través de la voz le permiten captar los matices y formar conexiones exclusivamente humanas con los demás usuarios. Asimismo, hay salas dedicadas a cualquier ámbito de interés.

¿Por qué no es pública?

El País, en conversación con los fundadores de la app, informó que hay dos razones fundamentales por las que la aplicación todavía no está en abierta a todo público: primero, sus fundadores creen que es importante que las comunidades crezcan lentamente. Esto en lugar de multiplicar por diez la base de usuarios rápidamente. Sus creadores conciben el audio y el podcast como un vehículo lento, pero seguro.

En segundo lugar, Clubhouse es todavía un equipo pequeño, formado por dos personas. Actualmente, ellos se encargan del escalado de la infraestructura, el desarrollo de funciones, la recopilación de comentarios sobre los productos y la construcción general de la empresa.

¿Cuáles son las reglas de Clubhouse?

Hay dos reglas fundamentales en la aplicación. Antes de ingresar en cualquier sala, la app le recuerda al usuario: “sé amable y cortés, trata a todos con respeto, los debates son saludables y naturales, pero la amabilidad es siempre un requisito”.

También se le recuerda que no se admiten discursos de odio o bullying: comentarios degradantes por cuestiones de raza, religión, cultura, orientación sexual, género o identidad no serán tolerados.

Por ahora, como la comunidad es pequeña, así que es fácil estar al mando de la situación. Pero a futuro, sus creadores no saben cómo controlar a millones los usuarios. En cualquier caso, la postura moral de Clubhouse, al menos de momento, parece querer marcar distancias con otras aplicaciones como Twitter o Facebook donde prima la libertad de expresión.