Tumores alteran el reloj biológico interno y crecen de forma descontrolada - 800Noticias
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Los seres humanos, al igual que el resto de seres vivos, portamos un reloj biológico interno –el consabido ‘ritmo circadiano’– que, básicamente, nos dicta cuando debemos alimentarnos y cuando debemos dormir. Un ritmo que, en el caso de los humanos, se rige por un ciclo de 24 horas –por lo general sincronizado con la alternancia entre día (luz) y noche (oscuridad)– y cuya alteración puede tener consecuencias muy graves para la salud. De hecho, numerosos estudios han demostrado que alterar este reloj biológico se asocia a un riesgo mayor de numerosas enfermedades, caso de las cardiovasculares y de la depresión. Pero aún hay más. Según muestra un estudio llevado a cabo por investigadores del Hospital Charité de la Universidad de Berlín (Alemania), parece que este ritmo circadiano también nos protege frente al cáncer.

Como explica Angela Relógio, directora de esta investigación publicada en la revista «PLOS Biology», «basándonos en nuestros resultados, parece que el reloj biológico actúa como un supresor de tumores, por lo que eludir este control circadiano supone una ventaja para las células tumorales. Por tanto, no puedo sino preguntarme si la interrupción de este ritmo circadiano debería ser incluido como la próxima seña característica del cáncer».

El tiempo importa

Sin bien nuestro organismo en su conjunto se rige por el reloj biológico, las células que lo conforman siguen un ‘horario’ totalmente distinto. Concretamente, se rigen por el ‘ciclo celular’, que les dicta cuándo deben y cuándo no dividirse. Sin embargo, este ciclo celular parece que se encuentra ‘estropeado’ en el caso de las células cancerígenas. O más bien, parece que este ciclo es ‘hiperactivo’, lo que da lugar a que estas células se dividan de forma totalmente incontrolada.

En este contexto, el ritmo circadiano es el encargado de controlar múltiples procesos moleculares del organismo entre los que se encuentran el metabolismo, la reparación del ADN –o lo que es lo mismo, la eliminación de las mutaciones, cancerígenas o no– y el propio ciclo celular. Tal es así que se puede sugerir que este ritmo circadiano actúa como un supresor de tumores. Entonces, ¿por qué se desarrollan las células cancerígenas? Pues porque según indica el nuevo estudio, se lo ‘saltan’.

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