La OTAN tomará medidas adicionales para tranquilizar a aliados del este
BRUSELAS, (AFP) – Los ministros de Defensa de la OTAN convinieron este martes en una serie de medidas para contrarrestrar las acciones de Rusia sobre Ucrania, pero aseguraron que se mantendrán dentro del marco establecido por un acuerdo firmado con Moscú en 1997.
La intervención de Rusia en Ucrania y la anexión de Crimea significa que está «en evidente infracción del Acta Fundacional de 1997» entre la OTAN y Rusia, dijo el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, en una conferencia de prensa.
Pero la OTAN se mantendrá dentro de los límites del acuerdo porque los aliados «quieren un sistema de seguridad basado en reglas», añadió al término de una jornada de reuniones de los ministros en la sede del organismo en Bruselas.
«Creemos que todas las medidas que estamos dispuestos a tomar pueden hacerse dentro de las reglas existentes» del tratado, dijo.
El Acta Fundacional de las relaciones y la cooperación entre la OTAN y Rusia, firmado en 1997, formaliza las fronteras de la post Guerra Fría y establece que tanto occidente como Rusia desplegarán fuerzas militares en los países que se encontraban bajo la esfera de influencia de Moscú en tiempos de la URSS.
Ambas partes también convinieron que no se tratarían como «adversarios».
Rasmussen indicó que los ministros acordaron desarrollar «un plan de acción para responder a los cambios en la seguridad» derivados de la crisis en Ucrania.
Esto incluirá medidas como preposicionamiento de pertrechos y equipamiento militar en los Estados miembros, mejorar las capacidades así como el tiempo de reacción de la OTAN.
Responsables de la OTAN expresaron su preocupación así como su sorpresa por la capacidad de Rusia para desplegar muy rápidamente 40.000 militares en la frontera con Ucrania y mantenerlos allí por algún tiempo.
Rasmussen indicó que Rusia incrementó su presupuesto de Defensa de 50% en los últimos cinco años mientras que los aliados lo redujeron un 20%.
Durante la reunión, los ministros saludaron el plan de seguridad de 1.000 millones de dólares anunciado este martes por el presidente estadounidense Barack Obama. Esta «contribución importante y oportuna» es una «clara señal del compromiso de Estados Unidos en Europa», subrayó Rasmussen.
El plan de Obama, que aún debe ser aprobado por el Congreso de Estados Unidos, prevé el despliegue de nuevas tropas estadounidenses, terrestres, aéreas y navales, en Europa del Este.
Si bien esta idea es celebrada por Polonia, que lo reclama, Francia y Alemania no quieren nuevas bases permanentes en el este, tema que será discutido en la cumbre de la OTAN de septiembre que se llevará a cabo en Gales.
