Salón Mundial del Automóvil, una fiesta para olvidar cinco años de crisis - 800Noticias
800Noticias
Internacionales

PARÍS, (AFP) – Carrocerías rutilantes, tecnologías de último grito y discursos optimistas. El sector del automóvil se encuentra este jueves en el Salón Mundial en París, con la esperanza de días mejores tras cinco años para olvidar.

El Mundial del Automóvil, que este jueves y viernes está reservado exclusivamente a los profesionales y a la prensa, pretende atraer a más de un millón de visitantes hasta el 19 de octubre. En los 125.000 m2 de exposición, 260 marcas, de ellas 71 fabricantes, rivalizan en novedades y modelos de ensueño.

Esta cita tiene lugar cada dos años alternativamente con Fráncfort (Alemania). Su última edición en 2012 estuvo marcada por la larga crisis de los mercados europeo y estadounidense, que empujaron a los fabricantes a realizar dolorosas reestructuraciones.

La crisis ya es historia en Estados Unidos donde ya se han amortizado las pérdidas de la crisis. También en Europa este mercado, que tocó fondo en 2013, ha empezado a recuperarse pese a que los europeos compran ahora un 20% menos de vehículos que en 2007.

«Hay recuperación en Europa, pero es lenta (y) no demasiado importante. Hablamos del 3 al 4% de crecimiento previsto en 2014», dijo el presidente de Renault, Carlos Ghosn.

De la misma opinión es el responsable de ventas y marketing de Volkswagen AG, Christian Klingler: «Europa va a salir y tiene que salir de esta situación que dura ya cinco o seis años».

Karl-Thomas Neumann, presidente de la marca alemana Opel, propriedad del estadounidense General Motors, también habla «de mercados de crecimiento en Europa, pero en conjunto, el mercado europeo es poco alentador».

Una vez más, la industria automovilística ha sido salvada por los países emergentes de Asia: China, primer mercado mundial, absorberá unos 24 millones de autos en 2014, y seguirá comprando coches a buen ritmo.

Otros mercados, considerados antaño como prometedores, atraviesan algunas turbulencias, como Brasil, Argentina y sobre todo Rusia donde las ventas de coches nuevos se han hundido bajo la presión de sanciones estadounidense y europeas por el papel de Moscú en la crisis de Ucrania.

En cuanto a los productos, entre las presentaciones mundiales más esperadas en París figura el nuevo Renault Espace, que cambia para acercarse a los «crossovers», un nicho de mercado en pleno crecimiento: silueta de 4×4 pero sin capacidad del todo terreno.

Carlos Ghosn lo presentó con gran pompa este jueves, subrayando que «el Espace ha hecho época» y que la marca «reinventa uno de sus modelos faro».

«Es un icono que dura», declaró, afirmando que es «la primera etapa de la renovación de la gama más alta antes de que salga el próximo año una nueva berlina» del segmento D, grandes coches de los que Renault ha estado ausente desde hace cinco años tras el fracaso de Vel Satis.

Opel, en rojo desde hace años, muestra su nuevo Corsa, el segundo modelo mejor vendido, y con el que espera recuperarse.

Smart presenta sus miniaturas urbanas de dos y cuatro puertas y Volkswagen, que aspira a convertirse en el primer fabricante mundial, su gran berlina Passat, mientras que la estrella de Ford será el Mustang, mítico cupé estadounidense que estará disponible en los concesionarios europeos el próximo año.

Jaguar, que trata como muchos fabricantes de cortar el césped a los alemanes en el jugoso mercado del lujo, presentará en París su pequeño XE familiar.

La gran tendencia de esta edición es la carrera de los motores de bajo consumo: Peugeot y Citroen apuestan por los dos litros a los 100 km con prototipos de aire comprimido, mientras que Renault dice que su «Eolab» consumirá 1 litro a los 100 km.

 

Asimismo, habrá espacio para el futuro coche autónomo (que se conduce solo) que despierta el interés de neófitos en este mercado como Google pese a que no estará listo antes de la próxima década.

Síguenos por @800noticias