Colombia prevé liberación de prisioneros de la FARC para la semana próxima - 800Noticias
800Noticias
Internacionales

Bogotá, Colombia | AFP |Colombia tendrá que aguardar hasta la próxima semana para la esperada liberación de un general y otros cuatro prisioneros de las FARC, requisito del gobierno para retomar los diálogos con esa guerrilla comunista, en suspenso tras la captura.

Dos días después de anunciar que estaba «en marcha» el procedimiento de entrega de los cautivos por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el presidente Juan Manuel Santos dijo este sábado que falta aún para que se concrete el operativo.

«Ya se recibieron las coordenadas. Estoy dando instrucciones para facilitar liberación para próxima semana», dijo en Twitter Santos, quien luego de las capturas interrumpió el proceso de paz iniciado hace dos años con las FARC, la principal guerrilla del país y la más antigua del continente.

El gobierno aguarda la liberación del brigadier general Rubén Alzate, el cabo Jorge Rodríguez y la abogada Gloria Urrego, retenidos el domingo 16 en Chocó (oeste), y de los soldados César Rivera y Jhonatan Díaz, prisioneros desde el domingo 9 tras combates en Arauca (este, fronterizo con Venezuela).

Santos dijo el jueves que, tan pronto como los secuestrados fueran devueltos, se retomarían las conversaciones de paz, que se desarrollan sin un alto al fuego, para resolver un conflicto armado de 50 años.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), frecuentemente convocado para la entrega de secuestrados, esperaba para lanzar el operativo, pactado con la mediación de Cuba y Noruega, garantes del proceso de paz colombiano que tiene lugar en La Habana.

«Seguimos a la expectativa y esperando que se dé lo más pronto posible», dijo este sábado a la AFP una fuente del CICR, el cual requiere garantías de seguridad tanto para los cautivos como para sus equipos.

Una fuente castrense indicó que el despliegue militar continuaba este sábado en Chocó y Arauca. «Siguen hasta que el CICR diga ‘Vamos a hacer la operación de liberacion’. Ellos ponen una hora y en ese momento se suspende la actividad militar durante 12-24 horas en el área comprendida en las coordenadas», explicó.

Las FARC habían reprochado el viernes el mantenimiento de las actividades militares en el terreno. «Mientras haya operativos esto se dificulta bastante», dijo alias Jesús Santrich, uno de los delegados de las FARC en Cuba. 

Ariel Ávila, especialista en el conflicto armado colombiano, consideró comprensible esta demora, dado además lo intricado y remoto de las zonas donde fueron tomados los prisioneros. 

«Se entiende el retraso para esas liberaciones. Hubo muchas operaciones militares en la zona, mientras las FARC estaban moviendo sus prisioneros hasta los lugares de los cuales ya dieron las coordenadas a las autoridades», dijo a la AFP.

Ataque a isla Gorgona –

Las FARC, surgida de una insurrección campesina en 1964, con unos 8.000 combatientes según cifras oficiales, presentaron estas liberaciones como «un gesto de paz y reconciliación».

Sin embargo, este sábado las autoridades atribuyeron al Frente 29 de esa guerrilla un ataque ocurrido en la madrugada en la isla colombiana de Gorgona, una reserva natural en el oceáno Pacífico, que dejó un policía muerto y cuatro uniformados heridos. 

Los guerrilleros llegaron en dos lanchas rápidas con capacidad para una decena de personas hacia las 03H00 locales, y usaron explosivos caseros que dejaron totalmente destruidas las instalaciones policiales, informó el brigadier general Luis Eduardo Martínez, director de la sección de Carabineros de la cual depende el destacamento atacado.

Tres miembros de la fuerza pública que habían sido reportados desaparecidos ya fueron encontrados resguardados entre la vegetación y bajo escombros, indicaron fuentes policiales.

«Rechazamos acciones terroristas en Gorgona contra la Policía», tuiteó Santos, y ofreció sus condolencias a los deudos del teniente abatido.

Durante el ataque, dos turistas suizos y 29 funcionarios civiles se encontraban en Gorgona, una antigua cárcel reconvertida en los años 1990 en reserva ambiental y turística.

«Aunque los civiles resultaron ilesos y pudieron salir del lugar, fue eminente el riesgo que sufrieron para su vida», dijo la estatal Defensoría del Pueblo, que vela por los derechos humanos en Colombia. 

 

El jefe negociador del gobierno colombiano, Humberto de la Calle, había pedido el viernes a las FARC un «desescalamiento» de sus acciones bélicas.

Síguenos por @800noticias