Compañía de seguros ofrece un millón de euros
PARÍS (AFP) – La aseguradora Lloyd’s ofreció el martes una recompensa de un millón de euros (1,3 millones de dólares) a cambio de datos que permitan recuperar las joyas robadas a finales de julio en el hotel Carlton de Cannes, evaluadas en un monto colosal de 136 millones de dólares.
El 28 de julio, armado con una simple pistola automática y con el rostro cubierto por un pañuelo y un gorro, un hombre llevó a cabo en este palacio de la Costa Azul uno de los robos más lucrativos de la historia, llevándose 72 anillos, colgantes, pendientes y otras joyas incrustadas de diamantes por un valor de 103 millones de euros.
Este asalto se sumó al célebre atraco realizado por el equipo de profesionales que en 2003 robó diamantes estimados en 100 millones de euros en el Diamond Center de Amberes, en Bélgica.
la recompensa por el robo del palacio de Cannes asciende a un millón de euros «prorrata» (en función de las informaciones suministradas y de las joyas que eventualmente sean finalmente recuperadas).
Esta recompensa, ofrecida «a la primera persona que suministre informaciones que permitan encontrar la mercancía», está sometida a «ciertas condiciones», según un anuncio cuyo texto fue transmitido el martes a la AFP. El mismo no precisa dichas condiciones.
El breve anuncio, que será publicado el miércoles en tres diarios franceses, estará acompañado por la foto de cuatro de las joyas hurtadas.
Loyd’s ya había ofrecido una recompensa de 700.000 euros después del ataque a la prestigiosa joyería Harry Winston en París en diciembre de 2008.
En esa ocasión, el botín fue estimado en 85 millones de euros. Seis meses más tarde, 80% de las alhajas robadas fueron encontradas, pero la policía se negó a precisar si ese desenlace tenía alguna relación con la oferta de recompensa.
La vocación de los soplones
Según un especialista en joyería de gran valor que solicitó el anonimato, la oferta de la aseguradora londinense podría «crear vocaciones entre los soplones y conducir las informaciones hacia las empresas de seguros londinenses».
Entre las 72 joyas robadas en el Carlton figuraban «34 piezas excepcionales». Estas alhajas, que valen «varios millones de dólares cada una», estaban aseguradas, lo que no sucede con las otras de un monto de «20.000 a 40.000 euros» cada una, precisó en esa oportunidad una fuente vinculada a la investigación.
«El tiempo favorece ahora a la policía y la gente de Lloyd’s», señaló el especialista de la joyería de lujo. Este destacó que muchas de las joyas robadas están registradas y por lo tanto no podrán ser vendidas en su estado actual en el mercado oficial o en una subasta. «De la misma forma que sucede con los cuadros de grandes maestros o las estatuillas robados», precisó.
El valor de las joyas, que serían negociadas con revendedores especializados por el o los ladrones –si tenía cómplices– no será el mismo que el valor de venta en el comercio. Para revenderlas, recordó este especialista, será necesario desarmarlas, lo que «disminuirá considerablemente» el valor del botín, sobre todo teniendo en cuenta que «no debe haber muchos compradores».
Tres días después del atraco en el Carlton, dos hombres armados asaltaron una joyería de lujo en Cannes, llevándose un botín estimado de más de un millón de euros.
Otros robos de joyas se produjeron antes en Cannes y en la región, sobre todo durante el festival de cine.
En mayo, un collar de diamantes de dos millones de euros del joyero suizo De Grisogno fue hurtado durante una fiesta de gala en Cap d’Antibes, al margen del festival.
Pocos días después, joyas de la empresa Chopard, estimadas en un millón de euros, desaparecieron en un hotel Novotel.
