Miguel Cabrera rige a su circuito con batazos

Para Miguel Cabrera la triple corona alcanzada en 2012 parece ser solo el punto de inflexión hacia su consagración como uno de los mejores bateadores derechos de la historia de las grandes ligas. Su festival de batazos del domingo lo convirtió en el primer pelotero en la historia de la instancia en dar tres cuadrangulares en un juego después de ser campeón bate, líder en remolcadas y jonrones la campaña anterior.

El tercera base de los Tigres de Detroit se erigió, además, en el primer jugador en irse de 4-4 con tres jonrones, cinco empujadas y cuatro anotadas en una derrota de su equipo. Fue el segundo partido de tres jonrones en la carrera de Cabrera, siendo el primero el 28 de mayo del 2010. Se unió a Cecil Fielder (3), Rocky Colavito (3) y Bobby Higginson (2) como los únicos jugadores en la historia de los Tigres en tener más de un juego de tres cuadrangulares. Sin embargo, el criollo aún cree que hay camino por recorrer, evitando cualquier comparación.

“Es muy pronto para decir que estoy a la altura de peloteros que marcaron una época”, dijo Cabrera al portal de los Tigres. “Por las mayores han pasado grandes jugadores, a los cuales respeto. Hombres que han dado 3.000 hits y conectado 500 jonrones. Todavía me queda mucho por dar para alcanzarlos”.

Cabrera comenzó su noche histórica con un hit en el primer inning y luego conectó jonrón de tres carreras en el tercero. Disparó un vuelacerca solitario en la quinta entrada y en la octava dio otro. Al final los Tigres cayeron y el aragüeño se convirtió en el octavo pelotero de la historia en dar tres jonrones en una derrota más de una vez en su carrera. Le pasó a Johnny Mize cuatro veces y en dos ocasiones a Babe Ruth, Ernie Banks, Dave Kingman, Glenn Davis, Joe Carter y el dominicano Sammy Sosa.

Triple corona a la vista. Miguel Cabrera amaneció ayer como el pelotero con más partidos de cuatro o más hits conectados (cuatro) y el líder a la Americana en anotadas (34), hits (67), empujadas (47), average (.387), porcentaje de embasado (.457), OPS (1.116) y bases alcanzadas (114).

Además, su promedio de .387 es el más alto para un jugador de Detroit para el 20 de mayo desde 1979, cuando Steve Kemp bateaba .402. Sus tres bambinazos le permitieron llegar a 11 y ubicarse a uno de ser momentáneamente dueño de la triple Corona, logro que Ted Williams y Rogers Hornsby alcanzaron en dos ocasiones, pero nunca en años consecutivos.

“Nunca sabes lo que puede pasar. Cuando te sientes bien, todo es posible”, finalizó Cabrera. 

Todos a sus pies

Cabrera recibió elogios de compañeros y rivales después de su exhibición contra los Rangers. Sin importar el bando, todos acordaron en que el venezolano es el mejor bateador de la actualidad.

“Nunca había visto a un bateador ser capaz de dirigir la pelota con tanta facilidad a cualquier parte del terreno. Si tratas de lanzarle en la esquina de afuera es capaz de acoplarse rápido”, dijo a MLB.com el manager de Texas, Ron Washington.

«Es un gran bateador», agregó el receptor Geovany Soto. «Es increíble”.

Sus compañeros también  quedaron boquiabiertos. Torii Hunter, Brayan Peña  y el manager Jim Leyland alzaron sus voces.

“He jugado beisbol por mucho tiempo, y es el mejor bateador que he visto. Podría haber ganado el juego solo”, dijo Hunter.

“Cabrera siempre trata de mejorar. Además, siempre está a la orden de sus compañeros. Dios le dio ese talento, pero siempre quiere superarse”, comentó Peña.

“Miguel hace que batear se vea fácil. Es el mejor”, finalizó Leyland.