Luis Suárez, una resurrección sin paraíso - 800Noticias
800Noticias
Deportes

MANCHESTER  (AFP) – Parecía que Luis Suárez no jugaría nunca más en Inglaterra y acabó siendo el mejor jugador y máximo goleador de una temporada en la que no consiguió, por muy poco, la Liga.

Treinta y un goles observan el paso arrollador del jugador del Liverpool desde que reapareció en setiembre tras cumplir una sanción de diez partidos por morder al defensa del Chelsea Branislav Ivanovic.

Y sin lanzar penales, responsabilidad que en el Liverpool recae en Steven Gerrard.

La precisión viene al caso porque el jugador de Salto, de 27 años, está en pugna con Cristiano Ronaldo y Lionel Messi -que sí lanzan las penas máximas- por la Bota de Oro al mejor goleador europeo de la temporada.

Tanto como sus goles, la imagen de Suárez que se recordará de esta temporada fue su desconsuelo al final del partido con el Crystal Palace, el penúltimo de la Premier League.

De cuclillas en la cancha, con la camiseta subida hasta la frente para ocultar el rostro, Suárez lloraba y lloraba por la Liga que se escapaba.

Las lágrimas firmaban la capitulación del Liverpool, que había regalado una ventaja de tres goles en los últimos doce minutos y le servía el título al City, que se impuso 4-0 al Aston Villa el miércoles.

«No podía parar» de llorar, explicó Suárez al diario Daily Mirror. «Es difícil. Al principio de la temporada nuestro objetivo era acabar entre los cuatro primeros y clasificarse para la Champions League, así que estuvo bien».

«Pero cuando nos vimos en posición de ganar la liga….», se lamentó el uruguayo.

— Una conducta intachable (menos para Mourinho) —

El regreso de Suárez a las canchas a finales de setiembre tras cumplir su sanción fue recibido con gran expectativa, no sólo por los aficionados del Liverpool, que andaba entonces quinto tras cinco partidos y acababa de sufrir su primera derrota desde la sanción del uruguayo.

La prensa también se frotó las manos y esperaba que el volcánico delantero volvería a las andadas.

«Gracias a Dios» por el regreso de Suárez, «esto ha estado demasiado tranquilo últimamente», se congratulaba The Times, comparando su regreso al de Eric Cantona, que volvió a jugar con el Manchester United en octubre de 1995 tras diez meses de sanción por haber propinado una patada de karate a un aficionado.

«¿Se comportará esta vez?», se preguntaba por su parte el Daily Telegraph

Además del mordisco -el segundo de su carrera, tras otro cuando jugaba en el Ajax-, a Suárez le habían sancionado por haber presuntamente proferido insultos racistas contra el defensa francés del Manchester Patrice Evra.

Pero nada ocurrió. Suárez ha acumulado unas pocas tarjetas amarillas, la mayoría por protestar, y ninguna roja. Y no se ha peleado con nadie.

La estrella de la selección uruguaya fue distinguida con los dos premios al mejor jugador de la temporada, el de la asociación de periodistas y el de la de futbolistas.

Sólo el entrenador portugués del Chelsea, José Mourinho, tercero en la Liga, lo lamentó refiriéndose indirectamente a la conducta del uruguayo

Se los tenían que haber dado al delantero bosnio del Manchester City Edin Dzeko, dijo, por «el tipo de jugador que es, un goleador, que asiste, que juega, que se comporta, que es justo, que no trata de poner al público en contra de los rivales».

 

Suscribir vía Telegram

Deje un comentario

Síguenos por @800noticias